El saludo. Querida “República”: se sabe que “La Cosa Pública” tiene una relación particular con “La Moneda”. Y no me refiero al instrumento aceptado como unidad de cuenta o medio de pago, sino a esa pieza de metal acuñada en ambas caras y provista de muchos simbolismos.
A estas alturas seguramente ya has advertido que, una y otra vez, “La Cosa Pública” nos muestra las dos caras de la moneda.
El mensaje. “El mundo es cruel y la única moralidad en un mundo cruel es el azar”.
Esta frase, que bien podría sonar como un diagnóstico duro de los tiempos que estamos viviendo, corresponde a Harvey Dent: el héroe-villano de Ciudad Gótica al que el director Cristopher Nolan dio vida en “Batman: El Caballero de la Noche”.
Su personaje, “Dos Caras”, refleja la complejidad y la dualidad presentes tanto en la toma de decisiones difíciles, como en la misma percepción de la sociedad.
Al modo de Harvey Dent, buena parte de nuestros gobernantes enfrentan o administran la oscuridad desde su propia dualidad; y algunos de ellos, incluso, lucen bastante cómodos “vistiéndose de héroes o villanos” según les convenga.
Ante los desastres naturales recientes que vivió nuestro país, derivados de lluvias torrenciales, inundaciones, desbordamientos de ríos, deslaves y efectos devastadores -con pérdida de vidas humanas y personas desaparecidas-, vimos “las dos caras de la moneda”.
La cara positiva de la solidaridad, del apoyo desinteresado de la sociedad civil y, en algunos casos -como Querétaro-, de la respuesta oportuna y coordinada entre los distintos órdenes de gobierno; pero también vimos la cara negativa de quienes lucran con la tragedia, de quienes “pintan” y “etiquetan” los apoyos de imágenes y colores partidistas, de “servidores públicos” que anteponen la foto en sus redes sociales a la empatía, convirtiendo la tragedia de otros en una campaña de promoción personal permanente.
Esa misma moneda “gira” cada vez que desde el oficialismo repiten que ellos no son como los de antes; mientras Cuauhtémoc Blanco juega pádel en plena sesión de la Cámara de Diputados; mientras los mismos “diputados guindas” bailan al ritmo de la Sonora Santanera, a quienes homenajean en la cámara baja sin estar aún resueltos los daños causados por las lluvias en al menos cinco estados del país; o cuando Omar García Harfuch diagnostica el debilitamiento de los cárteles -huachicol fiscal incluido- ante el Senado de la República y lo hace flanqueado por Adán Augusto López -a quien no tiene reparo en saludar efusivamente-.
La moneda sigue girando con sus dos caras: generosidad versus egoísmo, verdad versus mentira, lealtad versus traición.
La despedida. Querida “República”: no todo es negativo; claramente, tampoco positivo. Procura situarte en un plano ciudadano de realidad objetiva, “gira la moneda de tu vida” -llena de matices- y toma las mejores decisiones; al hacerlo, contribuirás a sanar “La Cosa Pública”.
La firma. Tu amigo: “El Discursero”.
P.D. En espera de una próxima carta, deshazte del sobre amarillo.

