Una de las cuatro firmas más prestigiosas del mundo en el sector de la consultoría y auditoría, es decir una de las “big four”, presentó esta semana en Querétaro un estudio donde se muestra la opinión y la percepción de más de 650 directivos, consejeros, presidentes, gerentes y algunos otros puestos relacionados con los negocios en el país. El estudio cuidadosamente presentado, refleja claro oscuros; por un lado optimismo en el sentido de que casi dos terceras partes de los encuestados consideraron que no caeremos en una nueva recesión y que además buscarán crecer durante este año. Pero también muestra datos muy escalofriantes cuando nos dice que solo 8% de los encuestados consideró que el 1er año del gobierno federal tuvo un impacto positivo o que solo 9% considera que la Ley de Ingresos de la Federación es buena; de hecho la Reforma Fiscal solo cumplió las expectativas de 3 de cada 100 encuestados. Aun así, con el pesimismo de que las reformas no terminan de impulsarnos como quisiéramos, con leyes recaudatorias que se consideraron de bajo impacto positivo, aún y cuando 8 de cada 10 participantes argumentaron que su organización no se verá impulsada por la ley de Ingresos, aun así los empresarios y empresarias asentados en México se atreven a soñar con crecimiento y expansión para este año. Pero lejos de recargar sus ánimos en lo que puede hacer el gobierno, seguro estos empresarios y empresarias recuerdan todas esas crisis de las que México ha salido adelante gracias principalmente al sector productivo, al sector privado, a los patrones y trabajadores que no tienen otra opción más que trabajar más duro para salir adelante con el país en hombros. Digamos que sin saberlo, nos hemos curtido la piel a prueba de balas, de crisis y de leyes desatinadas. Las noticias para Querétaro no son del todo malas, resulta que somos una de las 3 ó 4 entidades de la República Mexicana en la que una buena parte de los empresarios piensan expandirse en los próximos años, por lo que queda claro que estamos en el mapa económico junto a entidades como Jalisco y Nuevo León y que nuestro prestigio no se ha lastrado. La verdad es que modestia aparte, Querétaro tiene ya casi dos décadas siendo un destino favorito para la migración de las personas y los negocios, a pesar de nuestro pequeño tamaño de casi 1.5% de la población nacional, la gente sigue pensando en nuestro espacio como algo bueno. Como siempre hemos dicho, el reto consiste en ordenar en la medida de lo posible a todas las personas y organizaciones que tienen este plan de migrar, porque la lógica indica que las empresas lanzarán expediciones para explorar la tierra queretana y si ven que el agua está calientita, los escenarios son lindos y el panorama favorece el negocio, no tardarán en enviar un contingente más amplio de ejecutivos con sus respectivas familias para que traten de conseguir una rebanada más gruesa del pastel que aquí se reparte. Pensemos que si bien no hay pastel para todos, tenemos ingredientes y herramientas para cocinarlos, en el entendido de que cada vez tendremos más y mejores rebanadas para todos los que estamos acá. Podemos enfrentar este fenómeno de dos maneras: la primera es creyendo que la competencia se incrementa y que seremos relegados por la calidad de nuestros productos y servicios, la segunda es enfocándonos en la riqueza de la pluralidad, pues si alguien trae algo nuevo y/o mejor, podemos encontrar áreas de oportunidad en lo que ofrecemos para mejorarlo y crecer. Ha mercado revuelto, ganancia de empresarios. *Maestro en Arquitectura con estudios en Alta Dirección, Contexto Económico y Sustentabilidad. Más de 5 años desarrollando empresas.

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