Este jueves iniciará una nueva edición del mundialmente conocido Hay Festival, evento que trae consigo diversas actividades y mesas que ofrecen una mirada de la cultura y las artes de México y de varias partes del mundo. ¿Qué tan relevante es para Querétaro?

Los eventos culturales y artísticos son recurrentemente una bondadosa oportunidad para apreciar expresiones e ideas que ayudan a mirar la vida de otra manera. Ese es el ánimo del Hay Festival. Ofrece una variedad de actividades en un plazo de cuatro días en esta nueva edición en Querétaro, que van desde talleres para las infancias y jóvenes, a conciertos y mesas de diálogo acerca de temas selectos de ciencia, literatura, cine, música, periodismo, política y arte.

La variedad de actividades es una de las fortalezas del Hay Festival, puesto que permite empaparnos de una multiplicidad de conversaciones y discusiones de un alto interés intelectual. Esto se suma a otro acierto que es importante mencionar: las personas participantes en los eventos son agentes de evidente reconocimiento nacional o internacional y con amplia experiencia. Así, a raíz de su trabajo en su campo respectivo, ofrecen opiniones sólidas y sustentadas que ayudan a comprender el porqué de las cosas y a cuestionarlas a grosso modo.

Quienes participan como moderadoras o moderadores de las sesiones, también son actores trascendentales puesto que, si bien conducen la conversación en turno, su conocimiento y experiencia en el tema favorece un diálogo más rico que pueda ser de interés para la audiencia y la motive a interactuar a posteriori a través de la sesión de preguntas y respuestas, o incluso por medio de otros canales de comunicación post evento. Así, el ambiente que se genera en las actividades del festival se observa apremiante y cómodo para escuchar a la otra parte, interesarse en nuevos temas y dialogar en colectivo, situación que es un muy buen ejercicio y es de enorme relevancia para los momentos actuales en donde prevalece el individualismo y la polarización en muchas facetas en el mundo.

Por otro lado, un efecto que desencadena el Hay Festival es posicionar a Querétaro como referente de eventos culturales y artísticos de primer nivel en el país. Ciertamente, la oferta en ambos rubros es importante y diversa en todo el territorio nacional, lo cual es de gran satisfacción, puesto que significa que existe un consumo de eventos de esa naturaleza, nutriendo los procesos sociales y educativos de la población mexicana.

Sin embargo, para la entidad queretana, que lleva varios años como sede del Hay Festival, este evento le transfiere una imagen como espacio de acogida en donde las conversaciones y discusiones nacionales e internacionales de temas variados son bienvenidas, fomentando la construcción de puentes que ayuden a apreciar la diversidad de ideas y opiniones. De esta manera, Querétaro se observa dentro y fuera de las fronteras mexicanas como un lugar donde se prioriza por los canales de diálogo y el contacto con el exterior.

Resulta un evento sumamente atractivo en muchos sentidos que en más de una persona despertará el ánimo de seguir estando involucrada en los temas que se discutirán.