Regularmente encontrarás infinidad de artículos, notas, reseñas e incluso libros sobre los peligros de viajar “sola”, tips, recomendaciones, consejos, y más, pero si buscas los peligros de viajar “solo”, refiriéndome a los que podría tener un hombre, no encontrarás más que formas generales de los riesgos de viajar. Tratando de buscar los títulos y todas las combinaciones posibles sobre “cuáles son los peligros de viajar solo para un hombre”, por fortuna te toparás con los escritos de Miquel Silverstre, autor y productor de Diario de un Nómada, donde cuenta su experiencia sobre sus viajes, a lo que se ha enfrentado y todo lo que ha vivido como trotamundos en solitario. Y aunque desde la antigüedad existen muchos hombres que viajan solos, como el gran Marco Polo durante el siglo XIII, donde no muchas cosas eran documentadas, poco se dice a lo que están expuestos, incluso ellos mismos no hacen gran mención sobre ello. ¿O, acaso, será cierto el dicho que por el simple hecho de ser hombres están más seguros que una mujer, o se enfrentan a los mismos peligros, pero no se quiere ver o decir?

En definitiva y a mi parecer, los viajes en solitario para un hombre pueden ser tan o igual de riesgosos que los que realiza una mujer, pues también los hombres pueden ser blanco de atracos, asaltos, secuestros o violaciones, por lo que existen muchos artículos en los que se hace referencia a las precauciones que debemos tener al decidir hacerlo. Sería ilógico pensar que cuando un hombre viaja solo, no se enfrenta a situaciones de peligro, pues viajar en solitario seas del género que seas estás más vulnerable que cuando lo haces en compañía. Eso no significa que tengas que estar tan alerta a tu alrededor, que no puedas disfrutar el camino, claro que al estar solo contigo mismo se agudizan tus sentidos, pero tampoco se trata de sentirse amenazado en todo momento. Según una encuesta realizada por TripAdvisor, los hombres viajan en solitario un 14% más que las mujeres, la diferencia es que ellos se trasladan más por cuestiones laborales; sin embargo, en la actualidad las mujeres también han ganado terreno pero en cuestiones de placer. Actualmente hay muchos viajeros hombres que documentan sus trayectos en solitario y que coinciden con el lema de que “viajar solos los ha hecho más valientes, al salir de su zona de confort y atreverse a llenar sus bolsillos de experiencias enriquecedoras”.

Queridos lectores, como decían nuestros abuelitos, “peligros hay aquí y en China”. Peligro es tener miedo, pues mas allá de las cuestiones de inseguridad que se podrían o no suscitar con un viaje, hay otros riesgos que como viajera empedernida indudablemente comulgo más, y es que el mayor peligro es enamorarte de todo lo que el mundo tiene que mostrar, peligro de volverte loco al conocer nuevas culturas, de enamorarte de la comida, de sus aromas, los festivales, de aquellos majestuosos paisajes, la arquitectura, los nuevos idiomas y de la gente. ¿Peligro?, reitero, para mí, el peligro más grande es querer conocer el mundo y por miedo, no atreverse a disfrutar de él. Y ustedes, ¿qué opinan?