Los niños de Querétaro se encuentran ansiosos esperando conocer cuál será su regalo el próximo seis de enero, pues nos encontramos a tan sólo unos días de que los Reyes Magos visiten sus hogares. Tras la pregunta: ¿cómo te portaste este año?, la evidente respuesta de los pequeños, siempre positiva, refleja una gran esperanza.

Los Reyes Magos de Oriente es el nombre por el cual la tradición llama a los visitantes que, tras el nacimiento de Jesús de Nazaret, acudieron desde países lejanos para rendirle homenaje y llevarle regalos de gran riqueza simbólica como oro, incienso y mirra. Según la creencia católica, estos magos eran representantes de regiones paganas de pueblos vencidos.

La tradición que representa a los Reyes Magos dando regalos a los niños es más comúnmente utilizada en los países hispanohablantes, como el nuestro. De ahí que en México la noche del cinco de enero veamos en un brillo especial en los ojos de cada pequeño, pues resulta imposible esconder la emoción que genera recibir lo que tal vez por un año entero se ha deseado. Sin embargo, es más impresionante ver la ilusión que esta tradición genera en cada hogar.

Sólo necesitan imaginar a Melchor, a Gaspar y a Baltasar que viajaron de Oriente guiados por la estrella de Belén, que les condujo hasta donde nació el Niño Jesús para adorarlo, llevándole presentes que son valiosos por sí mismos y por lo que éstos representaban. Por ejemplo el oro que significa la naturaleza real y que usualmente se regalaba a los miembros de la realeza; el incienso que simboliza su naturaleza divina; y la mirra, un compuesto embalsamador para los muertos que representaría el sufrimiento y la muerte de Jesús.

Lamentablemente, hoy en día los regalos que tenían un significado profundo han ido desapareciendo, convirtiendo este pasaje bíblico en una linda historia para recibir presentes materiales. Por ello está en cada uno de nosotros, en cada familia, hacer que esto no suceda, es decir, recibir regalos materiales no es algo malo, sino olvidar el verdadero significado de los presentes que los Santos Reyes llevaron al Niño Jesús.

Debemos cuidar la esencia de esta tradición que a todos nos genera ilusión, acompañando a esos regalos del año con sencillos, pero muy valiosos presentes, que signifiquen para quien recibe y para sus seres queridos cosas tan valiosas como: salud, amor, amistad, humildad. En fin, lo que en realidad debemos regalarnos son buenos sentimientos unos para con otros.

Hagamos que este seis de enero sea distinto, que tenga mayor significado en nuestras vidas esta bella tradición. Porque un simple regalo se gasta, se termina o simplemente deja de llamarnos la atención, pero un presente con significado tiene más valor y será un regalo para toda la vida que podemos compartir con lo más valioso que tenemos: la familia. ¡Feliz Día de Reyes!

Regidora del ayuntamiento de Querétaro