El tema que encabeza este artículo resulta muy amplio y puede sonar demasiado pretencioso; en apego más fidedigno a lo que se expondrá, en el alcance de este artículo, se hará referencia especial a lo que acontece en algunos ríos de nuestra entidad y a lo que sucede en algunas presas.
Entre las principales fuentes de contaminación de cauces y ríos, se pueden mencionar las derivadas de la actividad industrial, agropecuaria, minera y urbana.
Proteger a los ríos de la contaminación es de vital importancia para la protección del medio ambiente, la fauna y de la vegetación que vive en ellos. La contaminación de los ríos tiene que ver con la incorporación al agua de materiales tales como los químicos, microorganismos, aguas residuales y residuos industriales, entre otros, los cuales afectan la calidad del agua de forma que la hacen inútil para muchos de los usos que se llevan a cabo hoy en día.
El uso de pesticidas, herbicidas y fertilizantes en la agricultura provoca que los escurrimientos, sobre todo en temporada de lluvias, acarreen las substancias contaminantes que pueden llegar a los ríos y presas.
Entre algunos de los principales contaminantes de los ríos se tienen las aguas residuales y otros residuos que tienden a demandar oxígeno; productos químicos y nutrientes vegetales. Estos pueden ingresar al organismo a través de la ingesta directa de agua en mal estado o pueden incorporarse a través del consumo de peces que habitan aguas contaminadas. Por ello se debe luchar por la protección de los ríos, es una obligación de todos.
En San Juan del Río ha sido una queja muy recurrente la contaminación que ha venido padeciendo el río San Juan, lo cual también afecta a Tequisquiapan y a las presas que se encuentran en el cauce, la Centenario y Paso de Tablas. Se acusa, como una de las principales razones, la descarga de aguas contaminadas producto de los procesos de las industrias en la zona. Es una responsabilidad principal de la Comisión Nacional del Agua, garantizar que las aguas que son descargadas a los ríos se encuentren cumpliendo la normatividad, requieren de autorización y el monitoreo frecuente.
Recientemente se ha reportado la contaminación del agua de la Presa Santa Catarina, Delegación Santa Rosa del municipio de Querétaro, observándose la muerte de peces y aves.
En visita realizada el martes pasado, se pudo encontrar que efectivamente existían algunos peces muertos y una nata de color verde azulado en el agua, en algunas porciones de la orilla de la presa. También fue notoria, en algunas zonas, la concentración de algas que podrían ser generadoras de toxinas con potencial de afectación a los vertebrados, esto está investigándose actualmente por académicos expertos de nuestra Alma Mater, la UAQ, a través de la Facultad de Ciencias Naturales, a petición de la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente y Desarrollo Urbano.
Se están estudiando muestras de agua de diferentes sitios del embalse y peces muertos recolectados en el sitio, así como el material que aparece como nata de tono verde azulado.
Los resultados se tendrán la próxima semana y como medida preventiva se ha ordenado, por parte de la Secretaría de Salud, suspender actividades de pesca en esta presa hasta que se tenga el diagnóstico que arroje la certidumbre necesaria para poder levantar la restricción.
No se tiene reportada o identificada alguna afectación a la salud de las personas de comunidades vecinas. Una vez que se tengan los resultados de la investigación, se podrá saber si existe algún agente o substancia tóxica, su posible fuente y posibles responsables.
Es de destacarse la labor coordinada que se ha tenido entre los tres órdenes de gobierno, el interés y atención directa del gobernador y del presidente municipal de Querétaro.
Procurador del Medio Ambiente