Aún no está lista la iniciativa de reforma electoral prometida por la presidente claudia Sheinbaum y la dirigente de Morena ya dicta línea por dónde debe de ir la reforma. La señora propone que no desaparezcan las candidaturas plurinominales, pero, su flamante propuesta consiste en que todos realicen campaña, que todos los candidatos “arrastren la suela”; sin la eliminación de minorías. El cambio que Luisa María le propone a la presidente, es que desaparezcan las listas de los distritos plurinominales y que no se asignen de acuerdo a la lista promovida por los partidos, no, que se asignen las candidaturas plurinominales a los que obtengan mayor votación y hayan perdido la elección por mayoría. Así las cosas, esos diputados por asignación de segunda minoría, como sucede con los senadores, recibirían el obsequio de la nueva democracia morenista.

Resulta una trampa electoral. En los estados con mayor número de electores, estarían los “ganadores” de las asignaciones, como la CDMX o el Estado de México. De tal suerte que, en contrario a esa propuesta, en aquellos estados en los que hay menos población nunca ganarían por lógica deducción, las segundas minorías. La señora Alcalde va por otra forma de quedarse con más diputaciones si consideramos que no pueden volver a repetir el atraco de la sobrerrepresentación que hoy ejercen en ambas Cámaras. En cuanto a la disminución del brutal financiamiento público que recibe su partido -más de 2 mil millones de pesos-, no entró en detalles; asimismo, en lo referente a la desaparición de los Oples insinúa que sea el INE el único organismo electoral que “controle” las elecciones.

A este respecto resulta un peligro. En sesión de Consejo General del INE, se abrió fuerte discusión sobre la alteración de la Lista Nominal Definitiva, que llevó a cabo personal administrativo de la Dirección Ejecutiva del RFE; varios consejeros se mostraron preocupados y molestos. Arturo Castillo comentó: “Es por ello que deseo hacer un llamado enfático para que las instancias correspondientes tomen las medidas necesarias para garantizar que estas situaciones no vuelvan a repetirse por ningún motivo en futuros ejercicios”. “Una lista definitiva no puede ser vulnerada, o el incumplimiento de instrucciones expresas de quienes integramos este máximo órgano de dirección del Instituto tampoco pueden ser desobedecidas. Esto, sin duda, atenta en contra del principio constitucional de certeza que debe regir la función electoral” ¿Y así quieren desaparecer los Oples?

Analista legislativo. @HectorParraRgz

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