Sin sorpresas la visita de Marco Rubio, Secretario de Estado de EU. Interesante fue el anuncio del acuerdo para la creación de un grupo de “alto nivel”, para contrarrestar a los carteles; sin mencionar quiénes formarán ese grupo y hasta dónde llegarán las atribuciones del mismo. La prioridad para ambos países, derivado de la reunión, fue la seguridad para ambas naciones, misma que han vulnerado grupos delincuenciales, sea miembros de los cárteles o de la delincuencia organizada; objetivos: detener el flujo de la droga hacia EU, el tráfico de armas, la migración, los túneles en la frontera, el dinero de los carteles y el huachicol ¡Poner orden en materia de seguridad!, la cual dejó de existir durante el gobierno de Andrés López Obrador, en cuya administración se disparó la comisión de ilícitos; además de haber roto las relaciones de cooperación con el gobierno de Norteamérica. Sheinbaum ha mostrado una conducta diferente, de cooperación.

El compromiso es trabajar juntos para desmantelar el crimen organizado transnacional mediante una cooperación reforzada entre las respectivas instituciones de seguridad nacional, cuerpos de seguridad y autoridades judiciales. La prioridad de EU: iniciar cuanto antes el “Programa de Cooperación sobre Seguridad Fronteriza y Aplicación de la Ley”; mecanismo binacional diseñado para enfrentar delitos transnacionales, con énfasis en el combate al crimen organizado, el tráfico de armas y los flujos migratorios irregulares. De tal suerte que ambos gobiernos reafirmaron la cooperación en materia de seguridad, la cual se basa en los principios de “reciprocidad, respeto a la soberanía e integridad territorial, responsabilidad compartida y diferenciada, así como en la confianza mutua; cooperación a través de acciones específicas e inmediatas, para fortalecer la seguridad a lo largo de la frontera compartida para detener el tráfico de fentanilo y otras drogas ilícitas, poner fin al tráfico de armas”.

Una vez más, Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad, sale fortalecido, dado que los compromisos son de su competencia. Un compromiso importante será el cumplimiento en lo referente al ámbito de la impartición de justicia; el nuevo presidente de la SCJN inició sus funciones con la violación a la Constitución al no haber respetado el estado laico y celebrar un “rito religioso” de corte prehispánico. ¿Cómo hacer cumplir con excelencia la impartición de justicia si muchos de los integrantes del Poder Judicial emanan de un fraude electoral?

Analista legislativo. @HectorParraRgz

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