AMLO no es dueño de las festividades patrias, ni de los símbolos patrios. Septiembre, conocido como mes de la patria por los eventos históricos que se vivieron en México por razones de la gesta independentista de la corona española. Resulta que el presidente López Obrador, decidió no invitar a ningún representante del Poder Judicial Federal a las festividades, como si fuese dueño de los actos conmemorativos de los distintos eventos históricos que nos dieron patria; los niños héroes, Doña Josef Ortiz de Domínguez, el grito de independencia, la festividad del desfile de las fuerzas armadas. Como si se tratase de fiestas particulares del presidente y no de actos formales, protocolarios relativos al Estado Mexicano, invita y desinvita a su antojo.
El colmo de la ignorancia y desconocimiento absoluto de las formalidades de actos de Estado. La presidenta del Senado Ana Lilia Rivera, justificó al presidente López Obrador, habiendo hecho hincapié en que, está en todo su derecho de invitar o no a quien aquel desee. No solo son descortesías políticas, son actos de prepotencia y autoritarios; en esos actos formales no se invita a las personas, la cortesía se obsequia a las instituciones y en representación de estas acuden las personas, llámense como se llamen. En distintos actos de descortesía en que ha incurrido el presidente en agravio de las instituciones cuando las ha relegado a un segundo plano, han estado representantes del Congreso y del Poder Judicial. La ofensa es para quien comete la arbitrariedad de omitir a los representantes de los Poderes Públicos.
Los caprichos y molestias evidentes del desdén al Estado de Derecho, son bochornosos para el jefe de Estado Mexicano, quien demuestra no solo la falta de cortesía republicana, rompe los principios democráticos de respeto al pacto federal. La obligación del titular del Poder Ejecutivo, es fortalecer la unión de las partes que conforman la federación y la colaboración legal e institucional entre los 3 Poderes emanados de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ¿Acaso pretende el rompimiento del pacto federal? Las pruebas de actos oficiales fuera de protocolo, en tratándose de los símbolos de unidad nacional, imputados al presidente de la República, sin duda que lastiman y quebrantan el tejido social. Parece no importarle las consecuencias al presidente López Obrador. Primero sus fobias antes que cumplir con la obligación constitucional de fortalecer la unidad nacional de los mexicanos. Autoritarismo a flor de piel.