De aliados políticos a enemigos. AMLO usó a la plantilla disidente de la SNTE, buscando alianzas con la CNTE. Estos gustosos aceptaron a razón de no compartir las políticas neoliberales. Pasó el gobierno de la Cuarta Transformación y no les cumplió, dejó vigente la normatividad que López ofreció abrogar, como el fondo de las reformas educativas; tampoco volvió a poner en vigencia la Ley del ISSSTE anterior al 2007, para volver a las prestaciones que otorgaban las normas aprobadas por los gobiernos neoliberales. Los “chamaqueó” Andrés López Obrador.
Vendrían las promesas de campaña a la Presidencia de la candidata Claudia Sheinbaum Pardo, mismas que ofreció a la CNTE: abrogar la normatividad que generó minusvalía a las pensiones de los miles de sindicalizados del sector magisterial federal. Ya como presidente, advierte a quienes fueron aliados en las luchas violentas, que no es posible, que el presupuesto federal no “aguanta” volver al sistema de pensiones. Incumplimiento expreso y tácito de Sheinbaum. La disidencia magisterial, decepcionada con la presidente, ahora amenaza con asistir a todos los lugares en los que ella acuda fuera de Palacio Nacional, para hacer sus reclamos. Por lo pronto, la señora Sheinbaum canceló su visita programada para el fin de semana al Estado de Guerrero, enclave de la ruda y violenta disidencia de la CNTE; antes aliados, incluso compartiendo los mismos métodos de lucha violentos.
Desde el pasado 15 de mayo se hicieron presentes miles de profesores en el Zócalo capitalino; no fueron atendidos por la presidente Sheinbaum, esta los canalizó con la señora Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Gobernación y el Secretario de Educación. Al no haber acuerdos favorables con la CNTE, los profesores salieron a las calles a causar problemas a los capitalinos con el bloqueo al Aeropuerto Internacional Benito Juárez y otras vialidades, generando un caos a miles de capitalinos; además de los perjuicios causados -se contabilizan en cientos de millones de pesos- a cientos de negocios y empleados de los alrededores del Zócalo; ahuyentaron a la clientela.
No fue sino hasta este fin de semana que volvieron a las acciones de costumbre, la violencia como método de presión; acudieron a las oficinas de la Secretaría del Bienestar, quemaron y causaron destrozos ¿Respuesta de las autoridades federales? Solo quejas lastimeras de las funcionarias por la violencia ejercida, quema y destrucción, esta vez a sus otrora aliados políticos. Mario Delgado, antes dirigente de Morena, responsable del sector educativo: ausente; Delgado, como dirigente político también fue aliado del sector, los usó y no cumple las pesadas demandas, tuvo que ser la misma presidente de la República, quien argumente que el presupuesto federal no aguanta el cumplimiento de las peticiones económicas para solventar las pensiones de manera honrosa al sector magisterial. Entonces ¿Por qué la misma Sheinbaum, ofreció en campaña que sí abrogaría la Ley del ISSSTE de 2007? Traición a sus aliados, engaño a sus hoy enemigos políticos.
Fácil podría ser la solución a las demandas del magisterio para alcanzar pensiones dignas y dejar de ser lastimeras para la última etapa de la vida productiva de las y los profesores. Precisamente los más de 10 mil millones de pesos que el Poder Ejecutivo “expropió” a los empleados del Poder Judicial, es una manera financiera de respaldar las pensiones ¡Vía fideicomisos! Sin embargo, parece que la política del Segundo Piso, es dejar sin protección social -las pensiones- a los trabajadores. Dos ejemplos. A los empleados del Poder Judicial les “expropian” el dinero que respaldaba mejores prestaciones, les robaron su dinero; a miles de aforistas de la tercera edad, también les “expropiaron” -robaron- 40 mil millones de pesos, porque no los usaban; pruebas indubitables, simplemente porque no utilizaban ese enorme capital, el cual, por cierto, ofrecieron que serviría para apoyar al sector magisterial. Al final nada, solo promesas ¿Por qué sí miles y miles de millones de pesos para obras infructuosas o empresas del Estado que no producen? Malas decisiones políticas, económicas y financieras de los gobiernos de la Cuarta Transformación, en perjuicio del “pueblo” al que dicen defender hasta el cansancio ¿El incumplimiento de la promesa también es decisión del pueblo bueno?