La diferencia entre información y propaganda radica en que mientras la primera tiene como objetivo transmitir datos de manera objetiva y neutral, la propaganda es información sesgada o engañosa con la finalidad de manipular la opinión pública para promover una causa o ideología específica. Partiendo de este hecho, podemos decir que el llamado VII Informe del gobierno extendido de Andrés Manuel fue un ejercicio de propaganda en el que se trató de convencer a la sociedad de las supuestas bondades de la 4t y del compromiso de Claudia Sheinbaum por consolidarla.
Como en los seis informes anteriores, la centralidad es hablar del mundo feliz en el que los mexicanos exultan de alegría y gratitud con Andrés Manuel y quienes gerencian su legado al referirse, de manera reiterada, al periodo 2018-2024 y a sus mayores logros: programas sociales clientelares y el aumento significativo del salario mínimo. Y no solo eso. Nos quedó claro quién manda en este país con la fotografía tomada en el despacho de Claudia Sheinbaum en la que ella posa al lado de la fotografía presidencial de López Obrador que se acostumbraba poner en los despachos de los funcionarios públicos, y que suele quitarse al término de cada sexenio para colocar la del presidente en turno.
Se hacen referencia al combate a la corrupción, pero dejando de lado el escandaloso caso lopezobradorista de Segalmex, el huachicol fiscal, el huachidiesel, con los que Morena financió ilegalmente campañas políticias desde 2021, incluida la federal, en 2024. Y no solo eso. En el informe destacan omisiones en temas tan relevantes como violencia, injusticia e impunidad de los morenistas, desapariciones, constricción de libertades y falta de medicinas, enre otros muchos temas.
Mentir, robar, traicionar y encubrir son los principios de la Omertá morenista. A diferencia del sexenio pasado, no se contabilizan las mentiras, falacias, imprecisiones, información no comprobable expresadas en la mañanera del pueblo.
La cochina realidad se rebela ante referencias insostenibles de abasto de medicamentos. Directivos de Nariz Roja han invitado a la presidente a acudir a los hospitales a que constate por ella misma la carencia de estos, el sufrimiento de los niños con cáncer y de sus familias. Madres buscadoras, al igual que agrupaciones que se oponen a las políticas abortistas, se sienten insultadas con el “llegamos todas”, que merece aclarar que se refiere exclusivamente a las morenistas.
El gobierno que dice no censurar y garantizar la libertad de expesión, resulta que cuenta con el mayor número de periodistas perseguidos en Tamaulipas, Sonora, Puebla, Campeche, entre otros.
También se habla de justicia, pero se evita la inexplicable exoneración de Pío López Obrador —ampliamente expuesto en un video por lo mismos que le daban dinero—, y, no obstante, cuando él y su hermano, el ahora expresidente, reconocieron que el “dinero era para la causa”, mismo que no fue reportado, con lo cual acreditaron diversos ilícitos.
Si hay una cosa propia del gobierno actual que vale la pena destacarse —y no por virtud propia, sino por presión de Donald Trump—, es la captura de algunos “generadores de violencia”, con lo que se le corrige parcialmente la página al macuspano.
Y lo peor: mentir y celebrar la toma del Poder Judicial que constituye un dato innegable de destrucción democrática al poner fin al equilibrio y a la división de poderes al apropiarse, mediante acordeones, del Poder Judicial.
Resulta paradójico que desde el poder se niegue la destrucción de la democracia que inició López Obrador y continúa Sheinbaum. De acuerdo a ello, este informe más que un ejercicio de rendición de cuentas, obedece a una estrategia propagandística para intentar negar lo evidente: sacrificar la democracia por su desmedida ambición de poder. Por eso, conviene preguntarle a la presidente, ¿por qué no informó sobre la destrucción democrática?
Periodista y maestro en seguridad nacional