El Partido Acción Nacional en Querétaro vive una crisis particular, a diferencia del ámbito federal donde han sido nulificados por la fortaleza legislativa de Morena, el PAN estatal le debe la crisis a quien por lo menos en el papel tendría que ser y fungir como el máximo representante del panismo queretano, el culpable de la caída en picada blanquiazul es el gobernador Mauricio Kuri, señalado por propios y extraños como el responsable que a poco menos de dos años de la elección de 2027 no tenga números alentadores en los sondeos y encuestas que no son encargados desde la oficina del jefe de gabinete, lo preocupante para el panismo es que tampoco cuentan con un perfil que brinde la confianza suficiente como para sentir tranquilidad rumbo a los comicios que se avecinan. Esta carencia de personajes candidateables ha sido evidente en la presente época de informes, partiendo del propio gobernador que temeroso de la bancada de morena, mandó al secretario de gobierno a dar la cara por él ante las y los legisladores locales, este ejemplo lo siguieron todos los alcaldes azules y la única rendición de cuentas fue ante su respectivo cabildo y meros encuentros controlados para generar contenido para redes sociales. Esta negativa de rendir cuentas ante la ciudadanía es muestra de su debilidad, mentira absoluta que sea una medida ante los desastres naturales de las últimas semanas, la realidad es que hasta escalofríos sienten cuando de dar la cara se trata, saben que le vieron la cara al electorado y ahora solo les queda evadir cualquier posibilidad de contacto con aquellos que dicen representar.
El escenario mencionado tiene sin candidato definido al partido que gobierna nuestra entidad, no es para menos, los nombres que suenan no convencen ni al más azul de los azules, por ejemplo, Ricardo Anaya parece más concentrado en mantener el dominio del PAN nacional que estar interesado por gobernar Querétaro y es que no es precisamente un candidato ganador, su experiencia en las urnas tiene números rojos, recordemos que ni siquiera en su propia casilla pudo ganarle a Andrés Manuel López Obrador, por lo tanto sus canicas juegan fuera del estado, esto no quiere decir que no quiera meter su cuchara en la decisión y su consentido parece ser el Alcalde de Querétaro. Justo hablando de la capital, Felipe Macías parece ir perdiendo terreno rumbo al 27, posiblemente por esto es que decidió darle codazos en las costillas al ex presidente municipal Luis Bernardo Nava, durante el informe brindado el lunes pasado, donde repitió una y otra vez que estaba poniendo en orden la casa, misma casa que el pan a mal administrado desde hace una década. Felifer como le dicen sus cuates, tiene una fortaleza al interior del PAN, su relación con Anaya y su grupo es cercana y si por protocolo se decidiera la candidatura él sería el elegido.
Por otro lado se encuentra el secretario particular de Kuri y alcalde de Corregidora, Chepe Guerrero poco o nada ha hecho en su municipio, su prioridad se centra en que al gobernador no se le olvide el cepillo y pasta dental durante los viajes que lo acompaña, conociendo el mundo con cargo al erario, total, ellos no pagan pero como se pasean. Su ausencia tiene molestos inclusive a los votantes que confiaron en él y salvo que su jefe decida la candidatura, Chepe está más cerca de tomar un vuelo Querétaro- Madrid que de la anhelada candidatura. Su contemporáneo, el senador Agustín Dorantes está borrado del mapa, en la cámara alta, su grupo parlamentario lo tiene en el rincón de los olvidados, en Querétaro Kuri no lo quiere, lo ve como una extensión de Pancho Domínguez y aplica la de entre más lejos, mejor. Eso si, Dorantes heredó el dominio de la estricta electoral de su padrino el ex gobernador y dicen las malas lenguas que en caso de no ser designado, soltaría las riendas para ayudar a los naranjas locales.
Otro de los implicados es Luis Nava, ex alcalde y actual secretario de desarrollo social, dependencia que tiene abandonada, su nombre poco suena y si no es por Felifer, esta semana no hubiera tenido mención alguna. Su caso es interesante porque podría ser punto de acuerdo entre los grupos del PAN sin embargo su pésimo desempeño en la capital lo hacen un perfil perdedor, su mala fama lo acompaña. Por último está Marco del Prete, quien dejando la Secretaría que tiene debería poner una agencia de viajes, ya que gracias a él es que el gobernador visita tantas veces el extranjero, este señor nada tiene que hacer, si él es el candidato es porque el PAN aceptó su derrota antes de tiempo.
Vaya escenario que tienen los azules, ni todos juntos arman un buen candidato. Tiempo al tiempo, en este juego electoral todos mueven sus piezas y en mas de una ocasión patean abajo de la mesa.
Exdiputado local de Morena