Esmeralda Neresis

Huesera

Pareciera que el enfoque de la directora rompe los huesos directamente delespectador, sobre todo, los de las mujeres que han dado a luz

26/02/2023 |08:08Esmeralda Neresis |
Redacción Querétaro
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Me entusiasmé cuando Donna, mi amiga periodista y fotógrafa, me había invitado al cine.

Veríamos  Huesera, ópera prima de la directora Michelle Garza quien explora en un film de terror, película que aborda un tema iconográfico para la mujer: La maternidad.

Plantea incluso interrogantes que en otras épocas siquiera podrían explorarse:  ¿Quiero ser madre? ¿El matrimonio realmente me hace feliz? ¿Esto es todo?

En esta propuesta, la directora revisa todos los mitos sagrados del papel de la mujer, como los roles conyugales y el valor a través de la mujer desde tiempos memorables, las mujeres habían de conformarse con que un hombre las seleccionaran, de inicio por un acuerdo monetario, después tenían la imposición social de ser madres, buenas esposas, tener todo limpio, planchado y los hijos educados.

Aunque son valores que a la distancia eran necesarios, Cervera se atreve más bien a explorar el otro lado de la moneda y cómo las necesidades de las mujeres como individuo van cambiando y se van manifestando socialmente, primero en el cuerpo y después socialmente.

Porque pareciera que el enfoque de la directora rompe los huesos directamente del espectador, sobre todo, los de las mujeres que han dado a luz y a las que sólo se acercan como un escenario imaginario de su vida.

Hay una escena donde están partiendo un pollo a la mitad y para mí fue el quiebre literal de las creencias, de la representación de un parto normal, en donde las que hemos pasado por esa experiencia literalmente sentimos que los huesos se expanden con las contracciones y llegamos al momento de quiebre, el dolor de una espalda que se rompe, la pelvis que se expande y el útero que se desgarra,  en donde la maternidad que comenzó con un deseo rosa se convierte en una pesadilla de horror y dolor.

También, de cierta forma, el desmembramiento del pollo es una alusión al rompimiento del tema tabú que la directora plantea: la importancia y el deseo real de la mujer acerca de la maternidad.

Porque pareciera que en la iconografía de la madre se asienta una corona de triunfos y expectativas por criar y sacar adelante a un grupo de individuos que, en su momento, serán libres de volverse independientes y tomarán sus propias decisiones, eso aterra, aterra que esa coronación caiga en pedazos cuando nuestros hijos toman decisiones totalmente contrarias a nuestras expectativas.

Así como la maternidad se atreve a replantearse si la vida en matrimonio siempre es lo más deseable, anhelamos encontrar en una relación perdurable la manifestación del todo en la existencia, pero para muchas mujeres no es así, incluso se plantea que tan importante es vivir una vida amorosa con las estipulaciones actuales.

No me atrevería a ver esta obra con un enfoque feminista, pero sí con planteamientos reales que cada vez mas mujeres se atreven a cuestionarse y lo que traerá una cambio significativo socialmente.

Necesitamos más propuestas que nos hagan pensar.
*Artista visual, escritora y terapeuta

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