Sollozar a la primera
que recibes un rozón.
Con un alma muy teatrera,
convertido en un llorón.
Ofenderse por lo menos,
y acusar por ruido hacer.
Con sus juicios no serenos
un relajo así encender.
Es la grilla futbolera
trasladada al ring grillero.
Opinión no muy certera
convertida en un mugrero.
Cuántos hay igual que Robben?
que con trampa al lloriquear...
estrategia no muy joven
que los lleva a más sonar.
Periodista