Concepción Delgado Parra

Una comedia de enredos: dos gemelos idénticos

Monreal defiende un Morena ideológico. Adán Augusto representa un Morena pragmático

Ante los rumores de la oposición sobre un posible “quiebre de Morena”, la presidenta Claudia Sheinbaum declaró en su conferencia matutina: “Vamos muy bien, los adversarios, muy hipócritas, se dedican a criticar a la Cuarta Transformación, esa es su tarea”. Probablemente la mandataria tenga razón, pero el reacomodo al interior del partido hegemónico es innegable.

Dos gemelos idénticos hoy se encuentran en el centro del huracán político. Ricardo Monreal, coordinador de los diputados de Morena, exhibido recientemente por realizar un lujoso viaje a Europa. Y, Adán Augusto López, coordinador de los senadores de Morena, colocado en el punto de mira de la opinión pública por su relación con Hernán Bermúdez Requena, quien fungió como su secretario de seguridad cuando fue gobernador de Tabasco, relacionado con el grupo delictivo “La Barredora” y hoy prófugo de la justicia.

No precisamente separados por un naufragio, como reza la “comedia de las equivocaciones” de Shakespeare. Más bien, se trata de gemelos entrelazados por un vínculo paradójico. Ambos pertenecen al ala de los “conversos” (expriistas y expanistas) y, en este momento, ven amenazados sus espacios de control político con la reforma electoral en curso.

Pero, la vez, son figuras enfrentadas entre sí. Monreal defiende un Morena ideológico, con poder distribuido en facciones. Adán Augusto representa un Morena pragmático-tecnocrático, heredero del PRI.

Los escándalos cruzados entre estos personajes, expresados en acusaciones de Monreal en las que vincula a Adán Augusto con desvíos de “La Barredora” (grupo criminal en Tabasco). Y, la respuesta de este último denunciando contratos opacos de Monreal en el Senado, muestran un choque de intereses políticos, territoriales y de supervivencia faccional.

La designación de Pablo Gómez para encabezar la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral propuesta por Claudia Sheinbaum busca neutralizar a estos dos personajes, que representan una dicotomía irreconciliable y un dique para conseguir la reconfiguración del poder dentro de Morena.

Declaraciones recientes de Monreal, donde señala que la designación de Pablo Gómez “desata los tiempos políticos”, advirtiendo sobre el riesgo de una “disputa interna insalvable”, apuntan a las reformas que limitan la reelección y el nepotismo desde 2027. Pero, también, evidencian que la reforma electoral amenaza su influencia sobre la asignación de candidaturas clave para 2027. La eliminación de plurinominales significa para Monreal perder instrumentos utilizados para negociar candidaturas con aliados. Por su parte, Adán Augusto necesita las plurinominales para mantener sus redes clientelares en el sureste.

El nombramiento de Pablo Gómez es una apuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum por someter a ambas facciones, usando la reforma electoral como ariete. Su éxito dependerá de la capacidad de operación del titular de la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral para negociar con los disidentes (o provocar su expulsión), arriesgando la unidad morenista de cara a 2027.

Doctorada en Ciencias Políticas y Sociales por la UNAM y Posdoctorada por la Universidad de Yale

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