La presidenta Claudia Sheinbaum enfrenta un escenario complejo. Una eventual crisis comercial, derivada de la imposición arancelaria del 25% a la industria automotriz, el acero y el aluminio por parte del presidente Donald Trump. Y las tensiones al interior del partido oficial, expresadas en casos como el de la senadora morenista, Andrea Chávez, aspirante a la gubernatura de Chihuahua, quien inició una campaña de autopromoción a través de lo que denominó “caravanas de salud”.
El 2 de abril, Trump anunció gravámenes a más de 180 países en lo que se considera el inicio de una “guerra arancelaria”. México y Canadá obtuvieron un trato preferencial al mantener el 0% de aranceles para productos que se encuentran dentro del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), dejando a salvo sectores clave como el alimentario, manufacturero, electrónico y farmacéutico.
Sin embargo, con el incremento del 25% arancelario a la industria automotriz, cuyas exportaciones de México a EE UU. representan el 79.7%, se pone en riesgo el empleo y las cadenas de suministro, además de aumentar el precio a los consumidores.
Frente a este anuncio, Sheinbaum apuntó: “Si hay más avances en la disminución del tráfico de fentanilo, entonces se disminuirá incluso esa tasa del 25%. Esa es la situación preferencial que tiene México”. Aunque subrayó su crítica a las medidas unilaterales de Trump.
Las nuevas condiciones obligan al gobierno mexicano a mejorar la competitividad para evitar pérdidas económicas. Ante este reto, la presidenta presentó 18 puntos para fortalecer la estrategia del Plan México que busca reducir la dependencia de las importaciones.
En la presentación realizada en el Museo de Antropología, Claudia Sheinbaum destacó: “El Plan México es el camino que –estoy segura– nos llevará a un país con más empleo bien remunerado, con menor pobreza y desigualdad, con mayor inversión y producción, con más innovación y menos carbono, que respete al medio ambiente y aumente nuestra autosuficiencia y soberanía”.
Mientras la presidenta busca mitigar los aranceles impuestos por la administración de Donald Trump, miembros de Morena buscan posicionar sus propios intereses. Tal es el caso de la senadora Andrea Chávez, quien inició la promoción anticipada por la gubernatura del estado de Chihuahua, haciendo uso de unidades médicas móviles, presuntamente financiadas por Fernando Padilla Farfán, empresario contratista vinculado a Adán Augusto López.
Las críticas no se hicieron esperar. El caricaturista “Monero-Hernández”, afín a la 4T, publicó el siguiente post en su red “X”: “La auto promoción que está haciendo @AndreaChavezTre en busca de la gubernatura de Chihuahua es simplemente inmoral. Totalmente contrario al ejercicio ético de la política abanderado por AMLO. Una vergüenza”.
Frente al complicado momento que vive México, Claudia Sheinbaum debe equilibrar la agenda económica con la estabilidad interna de Morena, evitando disputas que afecten su imagen de unidad y el alto nivel de aprobación que mantiene entre la población, base de su fortaleza en las negociaciones con Donald Trump.
Doctorada en Ciencias Políticas y Sociales por la UNAM y Posdoctorada por la Universidad de Yale