Documentos y análisis evidencian el fracaso y la pérdida de seguridad que ha tenido Querétaro durante los últimos 10 años. Es decir, en los gobiernos de Francisco Domínguez Servién y Mauricio Kuri González (primeros tres años, al menos).
El Índice de Paz México 2025 exhibe, con datos, parte de la realidad: “delitos con violencia” aumentaron 68.6% de 2015 a 2024 en Querétaro, el delito de homicidio incrementó 20.3% y la violencia familiar aumentó 533% en el mismo lapso de tiempo, puntualiza el documento.
Durante la presentación del Índice, realizada en el Auditorio Fernando Díaz Ramírez de la UAQ, otro dato dimensiona el fracaso de los últimos gobiernos panistas en Querétaro: Querétaro ya no está en el “top 5”, ni en el “top 10” de estados con más seguridad.
Con base en el ranking del Índice de Paz México 2025, la entidad que hoy gobierna Kuri González está en el sitio 15 –de 32-. A la mitad, cuando llegó a ubicarse anteriormente en primeros lugares. En el habla o argot político reciente, está en la “justa medianía”.
Al respecto, también es necesario señalar o poner atención a la Fiscalía de Justicia (comenzó a inicios de 2016), sobre sus labores, estrategias y acciones para en los hechos, disminuir la incidencia delictiva y llevar a cabo la procuración de justicia.
Durante el último año al menos, se recuerda más a la Fiscalía por dos polémicas: el desaseo en la elección del fiscal Víctor Alejandro de Jesús, en una coyuntura antes de que la bancada del PAN dejara de ser mayoría en la Legislatura del Estado; y el caso de una menor de edad en Huimilpan que había sido detenida y tratada como delincuente por un aborto, que incluso tuvo que intervenir la Secretaria de las Mujeres, Citlalli Hernández.
Volvamos al presente. Durante las últimas dos semanas, mínimo tres hechos dejan entrever la presencia de Crimen Organizado (C.O.) en Querétaro (nada que “son de fuera”, como suelen querer engañar las autoridades).
Las dos ejecuciones en avenida Zaragoza, el 30 de julio de 2025 en colonia Centro Histórico de la capital, muestran que incluso en el primer cuadro de la ciudad la delincuencia le ganó a las policías de Querétaro (estatal y municipal).
¿Cómo es posible que las autoridades se atrevan a presumir seguridad cuando ocurren delitos con el sello del crimen organizado en el centro histórico de la capital?
Posteriormente, entre la noche del jueves 7 y la madrugada del viernes 8 de agosto, sujetos incendiaron una vivienda en El Tintero –delegación Felipe Carrillo Puerto- previa riña. De acuerdo con las fotografías y la información consignada en portales web o secciones con la información de “nota roja”, el grupo de hombres que incendió el inmueble, con todo y vehículo, lo hizo con un modus operandi a las acciones de un grupo delincuencial, en vez de un enojo “casual” tras una riña.
Como tercer punto, el de más importancia o relevancia por su alcance internacional, el gobierno de Estados Unidos ubicó a Querétaro en el nivel 2 de violencia, debido a que “existe riesgo (…) por parte de grupos terroristas, cárteles, pandillas y organizaciones criminales”, de acuerdo con una alerta de viajes del gobierno norteamericano que retomó el periodista Jonatan N. Parra en el portal “AlertaQro”.
El gobernador Mauricio Kuri, el Secretario de Gobierno estatal, Eric Gudiño Torres; el Secretario de Seguridad Ciudadana (SSC), Iován Pérez; el fiscal de justica y los alcaldes de la zona metropolitana –Felipe Fernando Macías, Josué Guerrero y Rodrigo Monsalvo- deberían comenzar por aceptar la realidad y los datos –inseguridad en Querétaro-, antes de querer desviar la atención o minimizar la problemática.
Profesor de la UAQ y periodista