Estás en un lindo restaurante, de especialidades italianas. Día tras día, la rutina te atrapa y te ofrece contadas ocasiones de apreciar un lugar de manteles largos, vajilla elegante y servicio de primera. Estás con tu pareja, disfrutando de uno de los mejores platos que has probado en la vida. La conversación se anima gracias a un tinto Nebbiolo. Es un regalo que se han dado ustedes, luego del intenso trabajo.

En la mesa cercana está una mujer, con dos adolescentes. La madre pidió un platillo que se ve delicioso. Los chicos no hablan ni sonríen. Cada uno revisa su celular, la chica tiene audífonos. La señora no mira el restaurante. Come su comida sin verla, aunque fue creada por un chef y colocada en el plato como una obra de arte. Ella tiene un iPad sostenido por un vaso. Desde tu lugar, miras la pantalla. Puedes ver lo que su dueña ausculta.

Las imágenes son captadas por las cámaras de seguridad de su casa. Con su dedo recorre los espacios: sala, terraza, habitaciones, cocina, puerta principal. Mientras el cuerpo de esta señora está en un restaurante, su mente no ha salido de su propiedad. Ella se ha convertido en guardia de seguridad de sí misma; la preocupación reflejada en su rostro así lo dice.

Francisco Rivas, director de Observatorio Nacional Ciudadano, declara: “En los últimos 20 años el país ha visto cómo aumentan el homicidio doloso, los feminicidios, los secuestros, las extorsiones, los robos, los fraudes y muchos más delitos. Ha visto crecer la corrupción e impunidad. Ante ello es válido preguntarnos qué está fallando, particularmente si cada seis años el presidente y su gobierno en turno nos ha prometido recuperar la paz, mientras que al término de los respectivos mandatos descubrimos que la situación no solo no mejoró, sino que empeoró”.

Según el Índice de Paz México 2023, las cifras oficiales indican que en 2021 el impacto económico de la violencia en el país se estimó en 4.9 billones de pesos (243 mil millones de USD) lo que equivale al 20.8% del PIB. Para evitar ser víctimas de la violencia, la gente contrata guardias privados en condominios, universidades, escuelas, hospitales, centros de trabajo; sistemas de vigilancia y todo lo que usted sabe. Estos empleos no son productivos.

El desarrollo económico sostenido podría contrarrestar la violencia. La creación de empresas que manufacturen bienes y ofrezcan empleos bien pagados lograría disminuir la delincuencia y elevar la seguridad de las familias.

En 1980, el distrito Datang de la ciudad Zhuji en China tenía una población de mil habitantes. Con la instalación de fábricas de calcetines, hoy produce 25 miles de millones de pares al año: el 70% de la producción de ese país asiático y una tercera parte de los calcetines del mundo. En 2023, la población de Datang es de 60 mil y su industria ofrece empleos para 100 mil, incluyendo trabajadores que viven en lugares cercanos.

La industria china tiene áreas de oportunidad. Sin embargo, Datang produce el equivalente de dos pares de calcetines para cada persona del planeta. Operarios y mandos medios han incrementado su nivel de vida. Los mexicanos podríamos producir otras prendas, con diseños inspirados en la artesanía de los pueblos originarios, con toda su belleza.