En 5 días se llevarán a cabo las elecciones más importantes de la historia, donde se definirá el futuro de México. Las campañas han concluido en gran parte del país. Los cierres de las y los candidatos están a la orden del día. De ahí vendrá una veda de tres días que invita a la reflexión. Sin propaganda ni propuestas, las y los ciudadanos tendremos en nuestras manos el destino del país para los próximos 6 años.

En el plano federal la suerte está echada. La realidad es que la elección se definirá entre dos opciones o proyectos. Por un lado el oficialismo, personificado en la candidata del presidente, Claudia Sheinbaum, quien ha dejado en claro su afinidad con López Obrador y su firme convicción de continuar el mismo proyecto de gobierno. No le demos vueltas, votar por ella es apostar por la continuidad de la 4T.

Por otra parte, la oposición, personalizada en Xóchitl Gálvez, una mujer entrona, trabajadora y echada para adelante. Su propuesta se centra en tres máximas: Vida, Verdad y Libertad. Su objetivo es sacar adelante al país, apostando por el primer gobierno de coalición en la historia de México.

Ambos proyectos son válidos y legítimos, pero solo uno resultará vencedor. La decisión es muy simple. ¿Usted está conforme con los resultados del partido oficial? Si su respuesta es No, vote por Xóchitl.

En un plano más local, específicamente Querétaro, se estará definiendo la permanencia de esta entidad en el top ten de los mejores estados para vivir. Hay que ser claros. Querétaro es una de las entidades federativas con menores índices de inseguridad en el país. Está entre los estados con menos homicidios dolosos y se vive una percepción de paz y tranquilidad generalizada. Prueba de ello son las 10 familias diarias que, en promedio, llegan a vivir a esta entidad.

También el entorno económico es positivo. Estamos entre las diez economías más productivas del país, con un crecimiento constante que va en ascenso y que mantiene los índices del PIB más altos a nivel nacional. El desarrollo ha sido firme e indiscutible. Querétaro es ejemplo nacional en muchos ámbitos. Su cultura, tradición y progreso lo respaldan.

Todo ello no se construyó de la noche a la mañana, ha sido producto de años, incluso décadas, de buenos gobiernos, gobiernos abanderados por los dos partidos tradicionales: el PRI y el PAN que hoy han unido fuerzas en torno a un proyecto común, que busca, más allá de colores, proteger lo más valioso para las y los queretanos: su tranquilidad.

Sí, debemos aceptar que el avance de Morena ha sido impresionante. Es una maquinaria electoral. En prácticamente 10 años se ha convertido en la primera fuerza política del país. Sin embargo, ¿son igual de efectivos para gobernar? Usted vea los resultados del gobierno federal, tan solo en el tema de la seguridad ¿Como han gobernado en Michoacán, Estado de México, Guerrero, Campeche, Sonora, Sinaloa, Tamaulipas, Tabasco o Veracruz? ¿Las cosas van bien? ¿los resultados son positivos? Eso es lo que debemos valorar y poner en la balanza. ¿queremos eso para Querétaro?

Este 2 de junio, ejerza su voto, no lo desperdicie. Recordemos con honor el lema del insigne Francisco I. Madero, “sufragio efectivo, no reelección”, pero sobre todo, votemos en conciencia, actuemos con la cabeza, con visión a futuro…ese futuro para nuestros hijos.