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Uno de los símbolos más importantes en las fiestas de fin de año es el árbol de navidad, ya sea natural o artificial, grandes o pequeños o ahora de colores más novedosos como blancos, rosas e incluso negros; el árbol de navidad representa por sí mismo la temporada decembrina, pero que sería de estos árboles sin la decoración y las esferas que lo adornan y llenan de color, es a través de las esferas que cada familia le puede dar ese toque y significado tan especial a sus árboles, y por eso en EL UNIVERSAL Querétaro te traemos la historia de una de las comerciantes de esferas más populares del tradicional tianguis navideño de La Cruz.
Como es tradición cada año en el estacionamiento del mercado de La Cruz se coloca el tianguis navideño de La Cruz, es en este lugar donde decenas de comerciantes se instalan año con año a vender todo lo necesario para la temporada de navidad, ya sea desde pequeñas figuras para recrear el nacimiento navideño, pasando por lindas decoraciones de temporada, árboles de navidad, piñatas y muchos más, pero dentro estos comerciantes existe una persona que se dedica a vender esferas, ya sea por pieza, docena o por caja, se trata de la señora Elodia, quien por más de 30 años consecutivos ha vendido miles y miles de esferas a todas las familias queretanas.
Foto: Mitzi Olvera
Elodia Sánchez Venegas es originaria del Querétaro y tiene 67 años de edad de los cuales más de 30 le ha dedicado al comercio, en específico a las esferas navideñas de vidrio soplado que trae de Tlalpujahua, Michoacán, lugar que es conocido como el pueblo de la eterna Navidad.
Al dedicarse por tantos años a vender estos objetos la señora Elodia trabaja con ciertos artesanos de aquella zona que le ayudan a preparar las esferas de vidrio que traerá a Querétaro; ella las transporta por cajas y siempre busca traer una variedad importante de modelos para todos los gustos, desde las esferas lisas de un solo color brilloso o mate, hasta esferas con cientos de decoraciones o esferas con diversos tipos de figuras como son del mágico Santa Claus, muñecos de nieve, cascanueces, líneas de colores, racimos de uvas, entre muchas otras.
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Variedad
“Yo traigo esferas para todos los gustos desde lisas, decoradas, de figuras, planas, en fin, me gusta tener una gran variedad de esferas para que las personas puedan inspirarse en decorar su árbol y a través de las esferas le impriman su propio toque navideño, yo transporto mis esferas con cajas y me da mucho orgullo decir que es producto 100 por ciento mexicano, desde el material, su creación, su transportación y su venta es hecha por mexicanos que a pesar de las distancia en los estados unen sus manos para que más personas puedan tener en su hogar el trabajo que los artesanos de Tlalpujahua hacen con tanto amor y esfuerzo”, subrayó la comerciante.
Comentó que mientras a las personas de mayor edad le gustan las esferas de colores “tradicionales” como rojo, blanco, verde o azul, son los más jóvenes los que buscan esferas de colores fosforescentes, llenas de brillos o con diseños mucho más llamativos.
Foto: Mitzi Olvera
La tradición de una esfera
El negocio de la señora Elodia y su esposo, quien ya falleció, fue el primero que comenzó a vender esferas navideñas en el tianguis hace más de 30 años y aunque en la actualidad ya hay algunas personas más que venden estos objetos son pocos, no obstante el negocio de la entrevistada se caracteriza por tener un mayor tamaño, una mayor tradición en el tianguis y una mayor variedad de modelos.
Desde una pieza, por media docena, docena completa o incluso por caja las personas pueden comprar sus esferas: actualmente estas tienen un valor desde los 40 pesos por pieza, según el modelo, o 200 por docena, y las personas pueden llevar a su gusto, es decir todas iguales o todas diferentes, aquí el único límite para decorar el árbol de navidad es la imaginación.
Foto: Mitzi Olvera
No obstante Sánchez Venegas lamentó que a comparación de años anteriores la venta de esferas de cristal ha disminuido esto porque las esferas artesanales de cristal suelen romperse con mucha facilidad, mientras que las esferas de plástico son más duraderas y en la mayoría de los casos más económicas.
“La venta de esferas chinas o de plástico sí nos ha afectado porque muchas personas se van por el precio y prefieren comprar de esas, por un lado está bien porque las de cristal si no se cuidan se pueden romper muy fácilmente, pero el trabajo chino nunca se podrá comparar con el trabajo artesanal de las manos mexicanas”, destacó.
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Elodia invitó a toda la población a visitar el tianguis navideño que aún continúa a las afueras del mercado de La Cruz para observar los artículos que todos los comerciantes tienen para ofrecer, destacando que en su mayoría son productos artesanales o hechos por artesanos mexicanos.
“Me siento orgullosa de trabajar porque a mí me gusta trabajar, me siento orgullosa de vender productos mexicanos, a veces la ganancia puede no ser tan alta en específico con estos productos porque se nos rompen las esferas, siempre se rompen muchas, pero qué le hago es lo que me gusta vender, es algo mexicano que me llena de orgullo traer a Querétaro”, señaló.
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