Los mecánicos trabajan en dos autos, uno es una taxi ejecutivo, el otro un automóvil particular. Los tanques de gas están listos para instalarse en la parte de atrás de las unidades, en donde va la llanta de refacción. En el motor también instalan el sistema de carburación. En el taller de conversión a gas han tenido mucho trabajo. Incluso, dice Luis Fernando García, gerente del negocio que tiene apenas tres meses en la capital, las llamadas telefónicas para solicitar informes se duplicaron en los últimos días con el desabasto de gasolina que vive el estado y parte del país.

Luis Fernando explica que reciben, en estos días, en promedio seis llamadas diarias para solicitar informes sobre la conversión a gas LP, de las cuales tres concretan el cambio de combustible. Antes de la crisis de abasto de gasolinas, dice, recibían alrededor de dos a tres llamadas.

Comenta que el costo para hacer la conversión, en el caso de un automóvil con motor a cuatro cilindros, es de 25 mil pesos. “Se le instala un equipo de inyección de gas, computadora, inyectores, el tanque, las líneas. En mediodía está listo. Además se ofrece financiamiento”, indica.

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Dos tanques redondos esperan en el suelo del taller a ser montados en los automóviles. La forma y el tamaño de los mismos es igual al de una llanta de refacción. Se instalan en donde las armadoras colocan precisamente en neumático de repuesto, para no robar espacio a la cajuela. Aunque también se instalan tanques externos, que son cilíndricos y de mayor tamaño, ideales para camiones.

El litro de gas, dice Luis Fernando, cuesta 10 pesos, el ahorro es de 45% comparado con la gasolina. Los tanques para los autos, agrega, son del tipo toroidal, en forma de llanta, al que le caben 36 litros, aunque dependerá del modelo del auto, pues pueden montar tanques de 51 o 62 litros.

“En un Versa, le da autonomía de 300 kilómetros, con un tanque de 36 litros. Ocupa un poco más de gas. Si antes recorría 10 kilómetros con un litro de gasolina, ahora ocupará 1.2 litros de gas para la misma distancia, pero el costo del combustible es de la mitad”, subraya.

En una parte del taller están los tanques cilíndricos. Los mecánicos trabajan rápido en la instalación. En el motor instalan los inyectores y el resto del equipo de combustión, así como la computadora que regula el flujo de gas al motor.

El servicio, dice Luis Fernando, es cada 25 mil kilómetros, aunque al comprar el equipo, se tiene un año de servicios gratis y dos años de garantía. El servicio para un motor que funciona con gas es sencillo, añade, está en 15 minutos, pues sólo se deben de cambiar dos filtros, teniendo un costo de 300 pesos, en promedio, siendo más económico que en un motor a gasolina.

Los autos con conversión a gas, añade, no pierden potencia, además de que no dejan de usar gasolina, pues para encender el motor debe usar este combustible, pero unos segundos después, automáticamente se hace el cambio a gas, el conductor no lo nota.

Cuando el gas se acaba, el auto cambiará a usar la gasolina del tanque. El vehículo hace el cambio de manera autónoma, cuando el tanque de gas se vacía. Muy similar al funcionamiento de un auto híbrido.

A tres meses de haberse instalado en Querétaro, Luis Fernando dice que la respuesta a esta alternativa de movilidad ha sido buena de parte de los queretanos, pues además de taxistas, los flotilleros, camiones de mudanzas, son los principales clientes, aunque en fechas recientes, muchos conductores particulares se acercan para solicitar informes de sus servicios.

El joven gerente explica que existe desconocimiento sobre las bondades del gas LP en los coches, pues se quedaron con la idea de las tecnologías antiguas, mientras que ahora, con el uso de las computadoras, se regula de una manera exacta la mezcla de gas y oxígeno para la combustión.

Sobre la seguridad, dice que los tanques están diseñados para resistir 25 toneladas de impacto, incluso se les hacen pruebas de balística, para verificar su resistencia. Además, cuando llegan a presentar una fuga grande, el gas se congela al momento de salir, disminuyendo los riesgos.

Sobre los sitios para repostar, precisa que existen muchos sitios de gas LP. En el caso del gas natural aún la red no están tan extendida, pero del LP hay en varios puntos, por ejemplo, a lo largo de toda la carretera México-Querétaro.

Luis Fernando sabe, por experiencia propia, las ventajas del uso del gas LP, pues maneja una pick up convertida a este combustible, cuyo tanque de le permite recorrer mil kilómetros.

Además, “hay menos contaminación, el aceite del motor dura más limpio, las bujías salen limpias, porque la combustión es más limpia; hay un poco más de potencia, así como el menor desgaste del motor, así como más autonomía”, añade.

La única limitante para la instalación de gas es que el motor sea fuel injection, que no tenga carburador, pues se necesitan los inyectores individuales, los automóviles deben ser modernos, para usar esta alternativa que es amigable con el medio ambiente y más económica.

bft

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