“Hacen falta espacios [para las mujeres] pero también que demostremos capacidad. Lo podemos ver en política. Usábamos a las mujeres para ganar espacios, porque lo hacíamos por cuota de género, pero cuando llegaban las quitábamos, las famosas “Juanitas”, afirma Teresa Garay, directora de Noticiarios de la estación Respuesta Radiofónica (RR), quien con más de 24 años de carrera en los medios de comunicación ha logrado escalar y ver a lo largo de este tiempo cómo poco a poco las mujeres escalan puestos, aunque no con poco esfuerzo.
Es casi mediodía. Tere, como la conocen sus amigos, revisa en una computadora de la redacción de RR las últimas noticias generadas antes de entrar al aire con el noticiario vespertino. A su alrededor, su equipo trabaja y ultima detalles.
La jefa de información, Guadalupe Arcos, toma el control del trabajo, mientras Tere platica cómo han sido poco más de dos décadas de trabajo en los medios de comunicación queretanos.
Dice que la mayor parte de su carrera la ha hecho en radio, aunque también fue jefa de información en EL UNIVERSAL Querétaro en sus inicios. Además trabajó en otras estaciones de radio, aunque ésta es su segunda etapa en RR, donde ya trabajó en los noventa. El recorrido de Tere es amplio, de la desaparecida TVQ, hasta portales informativos.
Señala que su secreto para llegar a ocupar puestos de mando en medios de comunicación es la disciplina, “saber qué quieren hacer, estar siempre luchando. En todas las profesiones siempre existirá quien o quienes digan ‘es mujer, no la va a poder librar’. Pero uno lo tiene que demostrar con capacidad”.
De carácter amable, señala que en los medios de comunicación las mujeres en ocasiones se deben de esforzar el doble para mantenerse vigentes, pues es una profesión muy noble y en la que hay reinventarse todos los días.
Indica que a ella nunca le han dicho de manera directa comentarios misóginos, pues mucho se demuestra con el trabajo a diario, y eso “tumba cualquier idea”, lo que le ha sucedido, pues a largo de su carrera muchas personas han confiado en ella.
Tere se acomoda en una de las sillas de la cabina de RR desde donde se transmite el noticiario. Del otro lado del cristal, un locutor trabaja, en la otra cabina, donde están los locutores el aire.
Ahí, Tere se siente en su ambiente, en lo suyo. Una cabina y una oficina a la cual llega a las 7:00 horas y a veces le llegan a dar las 19:00 horas ahí, sin que se dé cuenta. Apasionada de su trabajo.
“Hay machismo en todo [ríe]. Si yo veo cobertura en deportes hay machismo. Yo creo que en muchas áreas hay machismo, tenemos que pelear contra ello. Recientemente veía que mujeres periodistas que cubren deportes no sólo se quejaban, sino que formaban una asociación en contra de la discriminación. Eso debemos dejarlo de lado, estamos luchando para que eso ya no se dé”, apunta.
Pone como ejemplo a Brenda Rico, reportera de deportes en RR, quien lleva alrededor de seis meses en la fuente, tratando de impulsar al género femenino en los deportes, pues no es tema exclusivo de los hombres.
Tere acepta que para ejercer el periodismo se deben de hacer sacrificios y ella sabía que si quería perseguir su sueño y dedicarse a lo que ama debía de hacerlos. “Sabía que habría ocasiones en las que no iba a ver a los amigos, que no iba a estar con la familia, pero los sacrificios han valido la pena. Tengo más de 24 años en esta profesión y no me arrepiento. Me ha costado, sí, como nos puede costar a todos, pero estar aquí, en este momento, con la gente que tengo, con al forma en la que trabajamos, no lo cambio por nada”.
Acepta que los sacrificios van desde levantarse temprano, hasta dejar de ver a los seres queridos, pero bien vale lo que ha logrado.
El equipo de Tere lo conforman ocho personas, entre reporteros, personal de servicio social y personal de redes sociales, que juntos hacen dos noticiarios, y con el cual se lleva bien, pues cree que un buen ambiente de trabajo siempre será mejor para desarrollar lo mejor de cada uno de los integrantes de un equipo.
“Me gusta trabajar en ambientes sanos, más de cordialidad, que no me vean tanto como la jefa, tampoco llegar repartiendo órdenes. Siempre estás aprendiendo. Ahora aprendo de los jóvenes, que tienen una facilidad para manejar redes sociales que es increíble. Son áreas que he trabajado, pero que no las he explotado tanto. Trato de generar un ambiente de compañerismo, y eso nos ha permitido crecer mucho. Más que llegar e imponerme, es trabajar conjuntamente, todos podemos hacer de todo, todos debemos de trabajar en todo, y eso nos ha redituado mucho”.
Tere dice que le gusta vivir el momento, pues el trabajo en los medios de comunicación puede ser muy “volátil”, y siempre se buscan nuevos horizontes laborales.
“Lo que puedo decir es que me visualizo en el periodismo activo, como han sido estos años. Me visualizo trabajando por las cosas que yo creo, también impulsando la agenda feminista, pero no el feminismo de ‘vamos a hacernos mártires’, no. Impulsando acciones que nos permitan a las mujeres ganar más espacios”, subraya.
Recuerda que cuando comenzó su carrera sí había mujeres, pero los medios de comunicación estaban ocupados por hombres, por lo que considera que a las mujeres les ha costado ganar esos espacios, gracias a lucha y capacidad.
“A mí me gusta que las mujeres sigan ese esfuerzo, sin hacer menos a los hombres, pues hay muchos que tienen mucha capacidad. Yo creo que se puede coexistir de manera equilibrada”, sostiene.
Enciende el aire acondicionado de la cabina de radio, pues el calor se comienza a acumular en el espacio donde por obvias razones no hay ventanas.
Agrega que a la par de mayores espacios para las mujeres, se requiere que también aumente la capacidad de las mismas, para desarrollarse más en los medios de comunicación, que puedan acceder a puestos de dirección y toma de decisiones.
Asevera que el ejemplo se puede ver en política, donde hay un equilibrio en cuanto al número de mujeres en la misma, pero muchas fueron usadas para ganar elecciones, las conocidas con “Juanitas”.
Agrega que en este momento no hay una mujer que dirija los destinos de un partido político, aunque se debe de ver que tengan capacidad.
Pone como ejemplo el Congreso local, donde ahora lo preside una mujer, pero cuando desde la pasada Mesa Directiva lo pudo haber hecho, pero en ese entonces se acusó que no se llegó a consensos entre las propias mujeres.
“Hay que dejar de lado, eso o las mismas mujeres impulsar esos acuerdos que nos permitan generar más espacios y equilibrarlos con las capacidades, no porque sea mujer aunque no tenga ni idea va a estar ahí. No. Hay que demostrarlo con capacidad y sí, creo que hace falta que ganemos más espacios”, puntualiza.
Tere regresa a su redacción, con su equipo. Se acerca la hora del noticiario vespertino y tiene que supervisar la información, afinar detalles para que todo salga perfecto, como debe de ser todos los días. Ahí, es donde Tere se mueve como pez en el agua, está en lo suyo y es feliz.