Tras 26 años de liderazgo, Carlos Romero Deschamps renunció a la Secretaría General del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).

Manuel Limón Hernández, hombre de toda la confianza del dirigente petrolero, asumirá de forma interina el liderazgo del gremio para, en un plazo de 90 días, convocar a elecciones con voto secreto.

Al menos siete corrientes buscan encabezar la secretaría general tras la renuncia de Romero Deschamps. Algunas de estas corrientes han expresado públicamente su simpatía por el presidente Andrés Manuel López Obrador, mientras que a otras se les liga con el exdirigente petrolero Joaquín Hernández Galicia La Quina, detenido el 10 de enero de 1989 y fallecido en 2013.

Ayer, secretarios generales de las 36 secciones del STPRM realizaron a puerta cerrada una asamblea en la que se presentó la renuncia. En un desplegado, Romero Deschamps acusó falta de cooperación entre trabajadores y administración, y un escenario poco favorable.

“Hoy, por razones poco claras, no observamos la cooperación que debe existir entre trabajadores y administración para impulsar los proyectos que permitan el verdadero avance de Pemex hacia su consolidación. Tal parece que se ha recrudecido la antigua posición de vernos como contrarios y no como complemento en la tarea de respaldar a Pemex en su compromiso histórico de ser garantía del desarrollo nacional”, dijo.

Según los estatutos, tras la dimisión, Limón Hernández, quien se desempeñaba como secretario de Actas y Acuerdos del STPRM, asumirá de manera interina el liderazgo.

Una de las corrientes que ha expresado su apoyo al presidente López Obrador la encabeza María de Lourdes Díaz Cruz, conocida entre los petroleros como Lula, dirigente del Movimiento Nacional de Transformación Petrolera.

Díaz Cruz señala que aún quedan los secretarios generales de las 36 secciones que conforman el STPRM, por lo que deben seguir luchando para alcanzar un cambio en la organización.

Sergio Carlos Morales, quien encabeza el Frente Nacional Petrolero, es otro de los personajes más visibles en la carrera por dirigir el STPRM. En agosto pasado organizó una asamblea con al menos 500 miembros del sindicato en la que se pronunciaron por la destitución de Romero Deschamps.

El exlíder petrolero enfrenta 41 demandas de distintas secciones sindicales inconformes con varias elecciones y reelecciones. Las demandas se encuentran en trámite en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA).

A Omar Toledo Aburto, presidente de la Unión Nacional para el Desarrollo Profesional Económico y Social de los Trabajadores de la Industria Petrolera, se le ha ligado con el exdirigente petrolero Joaquín Hernández Galicia La Quina.

Otra corriente es la Coalición Petrolera Independiente, dirigida por Jorge Hernández Lira, quien contendió por la Secretaría General del STPRM en las elecciones internas de 2012; su grupo asegura que ganó, por lo que denunció fraude.

A la lista de disidentes se agrega Eliel Flores Ángeles, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de las Empresas Productivas del Estado Petróleos Mexicanos, Subsidiarias y Filiales, creada en 2014 y que ha buscado ser reconocida de manera oficial para disputar la titularidad del Contrato Colectivo de Trabajo en Pemex.

En marzo de este año otro grupo de trabajadores conformó el Sindicato Petroleros de México (Petromex), con Yolanda Morales Izquierdo como su secretaria general.

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