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La casa de la fallecida periodista cultural Sara María Arana Figueroa fue saqueada y apropiada indebidamente por un presunto abogado Arturo Crotte Castro, quien cometió el despojo con documentación falsa de un presunto arrendamiento que nunca se realizó, así lo denunció su heredera Laura Cervantes.
Sara Arana, abogada y reconocida periodista cultural, escribió incontables textos en los medios locales y llevó acabo presentaciones de artistas. Sin embargo, desde principio del año su salud se tornó delicada y falleció a causa de cáncer el pasado 11 de mayo.
A decir de sus vecinos, que se reservaron su identidad, la casa fue invadida por desconocidos y saqueada el pasado 18 de agosto.
El vigilante del inmueble fue amenazado por el presunto abogado Arturo Crotte, quien argumentó que acaban de entregarle el inmueble tras realizar un contrato de renta —presuntamente fechado en marzo, cuando Sara María recibió atención médica.
Entre la lista de objetos extraídos se encuentran: estufa, refrigeradores, candiles, sillas, roperos, el mostrador del hostal. Objetos que se encontraron a la venta, en los días siguientes, a través de Facebook.
De acuerdo a la heredera están corriendo los trámites legales para devolverle la propiedad.
Al interior de la casa observan pintores y albañiles trabajando; mientras que en redes sociales se han dado muestras de solidaridad de la comunidad artística a través del hashtag #SalvemosLaCasaDeSara así como en una publicación del perfil de Facebook Lengua Suelta se describen los actores del caso.
