La planta de separación de residuos sólidos urbanos en Querétaro se mantiene clausurada desde hace 120 días, informó el secretario de Servicios Públicos Municipales, Armando Presa.
El funcionario detalló que Broquers Ambiental, empresa encargada de la operación, ya inició las obras requeridas por la autoridad ambiental para habilitar un área de confinamiento, condición necesaria para que la Procuraduría pueda retirar —aunque sea de forma condicionada— los sellos de suspensión.
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Paralelamente, el municipio realiza una auditoría ambiental para revisar los compromisos pendientes que la empresa mantenía antes de la clausura.
Debido al tiempo que la planta ha permanecido sin operar, Broquers deberá cubrir una indemnización de 11 millones de pesos al gobierno municipal.
Presa recordó que esta planta realizaba la separación del 40% de los residuos del municipio, por lo que su reactivación es clave para normalizar el servicio de manejo y disposición de basura en la capital.