Padres de familia de los alumnos de la escuela primaria José Morales Lira, en La Loma, en la calle Monte Cárpatos, viven como en pandemia. Derivado de las pasadas lluvias, una barda perimetral de instalaciones deportivas aledañas al plantel cayó y aún no ha sido reparada, por lo que los estudiantes toman sus clases en línea.

Aunque la fecha que les dieron para entregar la obra y regresar a clases es en este mes, ninguna autoridad les ha notificado de manera formal la conclusión de los trabajos y el regreso presencial a clases.

Narran —pidiendo el anonimato por temor a represalias a sus hijos por parte de las autoridades de escuela— que han pasado ya muchos meses y no han podido concluir con los trabajos de la barda.

FOTO. DOMINGO VALDEZ
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“En julio nos hicieron saber que estaban trabajando en el kinder que está a un lado. Está un kinder y está la primaria a un lado de la otra. Nos comentaron que habían estado trabajando en el kinder haciendo la barda perimetral. A espaldas del kinder se encuentra un parque que se llama Semillero. Ahí hay una cancha de futbol que da exactamente con el kinder y la primaria.

“Cuando estaban haciendo estos trabajos, se derrumbó la barda que formaba parte del campo de futbol. Se encontraban trabajando en ese momento las personas que estaban haciendo cimientos. Al caer la barda, lamentablemente falleció una persona. Toda esa afectación fue para el kinder como para la primaria”, recuerda uno de los padres de familia.

Cuando inició el actual ciclo escolar, las autoridades de la escuela llamaron a los padres de familia para hacerles saber la situación, aunque ellos ya sabían de los hechos, pues los medios de comunicación informaron del suceso.

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Las autoridades de la primaria les notificaron que la barda tenían que ser reparada por ellos mismos con las cuotas voluntarias que se piden al principio del ciclo escolar. En ese momento muchas madres y padres estuvieron en desacuerdo, pues comentaron que si el parque era municipal o tenían un dueño, ellos, los encargados del parque, se tendrían que encargar de los daños por la caída de la barda.

“Nos dijeron que eran parte del municipio (de Querétaro). Se estuvo contactando al municipio, a la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el Estado de Querétaro (USEBEQ). Una semana después de la fecha de ingreso, del regreso a clases, nos dijeron que los papás no íbamos a pagar para arreglar esas bardas. Lo iban a hacer tanto la USEBEQ como el municipio, pero por obvias razones, los niños no podían ir a clases presenciales a la escuela, porque la barda de la primaria estaba dañada y corría el riesgo de caerse también, y esa barda da a dos canchas que tienen los niños en la primaria, que son usadas para las actividades deportivas y de recreo de los menores”, agrega una madre de familia.

FOTO. DOMINGO VALDEZ
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Los alumnos han tenido clases en línea. La USEBEQ se comprometió a entregar las bardas en los primeros días de diciembre. Esto, dicen los padres, afecta a la educación de sus hijos, pues no aprenden de la misma manera. Además, no están todo el horario estudiando. Hay días en que apenas están dos horas en clases.

“Hasta donde nosotros sabemos no hay avances en la barda de la primaria, porque en la del kinder comentaron que ya hasta regresaron a clases ellos. Pero en la primaria comentan que no ha habido avances. No sabemos si los niños van a regresar a clases antes de las vacaciones de fin de año o regresando de las vacaciones”, agrega otra mamá.

Algunos padres que viven cerca de la escuela comentan que no se ven avances en las obras. Por la parte del parque no se alcanza a ver nada; mientras que por la escuela está tapado con plásticos.

No saben si en realidad están trabajando tanto USEBEQ como el municipio, porque fueron quienes se comprometieron a reparar el daño de las bardas, construyendo nuevas bardas más fuertes, o si ya hay avances para que los niños vuelvan a clases presenciales.

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En tanto, la directora de la escuela no tiene contacto con los padres para informarles sobre los avances de los trabajos.

En el plantel, unas tablas tapan los trabajos que hacen trabajadores de la construcción.

En el jardín de niños vecino de la escuela ya hay clases. La madre de uno de los pequeños alumnos del kínder dice que en ese plantel la barda ya se concluyó.

La dependencia encargada de la construcción de la barda y de todo inmueble educativo es el Instituto de Infraestructura Física Educativa (Ifeq), que lo hace en colaboración con el gobierno del estado y la Secretaría de Educación.

FOTO. DOMINGO VALDEZ
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En este caso, el Ifeq es quien se encarga de la edificación de la barda caída; mientras que la USEBEQ es quien tiene que gestionar las obras que se necesitan.

Ya en este mes, los padres de familia esperan que la barda quede terminada y sus hijos puedan volver a clases presenciales, en primer lugar para que los estudiantes puedan retomar su vida escolar y aprendan de la manera correcta y, por otro lado, para que ellos pueden volver a sus empleos y a sus actividades productivas que se han visto afectadas por este percance ajeno a ellos y al plantel.

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