La idea original de las piezas es de Rubén Maya Moreno, artista es reconocido por su obra tanto
pictórica y gráfica como de instalación.
Durante el proceso de creación, se contó también con la colaboración del queretano Humberto
Cabrera González, artesano de cantera de San Idelfonso.
Las piezas tienen cuatro globos oculares, los cuales representan una doble mirada, que viene
desde el punto de vista de la razón y el corazón.
Cada una de las unidades cuenta con triángulos, que representan la alta energía, el ojo de Dios y
el eterno equilibrio.
El conjunto monumental está integrado por 17 personajes de tamaño real: ocho están sentados y
nueve se encuentran de pie.