Se puso la primera piedra de la segunda fase de inversión de la empresa Redwings en Querétaro, proyecto que consiste en la construcción de un hangar en las instalaciones del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro (AIQ).

El hangar contará con una superficie de 2 mil 500 metros cuadrados, con servicios de guarda y de mantenimiento, tanto de aeronaves privadas como comerciales, con esta obra se generarán 200 nuevas fuentes de trabajo indirectas, y treinta empleos directos, todos ellos queretanos.

En su participación, el titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu), Marco Antonio del Prete Tercero, indicó que “el aeropuerto mantiene un importante crecimiento, ya que, en promedio al mes, se mueven un total de 80 mil pasajeros con más de 100 operaciones diarias, así como un crecimiento de 45% en el área de carga, y esperamos llegar a más de 50 mil toneladas de carga movidas”, señaló.

Con esta segunda etapa, Redwings coadyuva a fortalecer el turismo, los servicios y el desarrollo de la zona serrana, creando el puente aéreo entre la capital, la Sierra Gorda y San Miguel Allende; mediante alianzas con las autoridades de turismo y tour operadores de la región, al mismo tiempo que se brinda una nueva opción a los visitantes de vivir una experiencia única y conectividad.

Querétaro es la puerta del Bajío, y se ha posicionado como la capital de la industria aeroespacial en México, con el primer parque especializado del país; el cual alberga a numerosas empresas del ramo.

Es el cuarto lugar a nivel mundial en inversión aeronáutica, y es el estado en el que la empresa decidió situar su base de operaciones por su privilegiada ubicación geográfica, y con la misión de contribuir a posicionar a Querétaro como el estado líder de esta industria, en todos sus segmentos.

A lo largo de 11 años de trayectoria, Redwings cuenta con una flota de 11 aeronaves (jets y helicópteros) y con más de 40 mil horas de vuelo a destinos de toda América y Europa. Además, tiene dos de las certificaciones más importantes en seguridad a nivel mundial: IS-BAO y Wyvern, que aseguran la calidad en el servicio.

La primera fase en Querétaro, consistió en la creación y consolidación del único taller de mantenimiento privado para aeronaves, avalado por los más altos estándares de la reglamentación mexicana y estadounidense. En esta fase construyó una terminal privada (FBO), caracterizada por su exclusividad dentro del Aeropuerto de Querétaro, lo que garantiza a sus clientes una experiencia única en cada vuelo.

arq

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