Al menos son 26 mil personas las que padecen alguna discapacidad y que mantienen el anhelo de insertarse de manera productiva en la sociedad, por lo que es indispensable generar una cultura de no discriminación, para que este sector logre alcanzar sus objetivos, consideró Lídice Rincón Gallardo, Directora del Instituto Municipal para Prevenir y Eliminar la Discriminación (IMPED).

La inclusión laboral de las personas discapacitadas es el tema que más preocupa a todas las personas que se encuentran en esta circunstancia de vida, reconoció Lídice Rincón. Por lo regular, las autoridades locales —reconoció— se ocupan de proponer y agendar ferias de empleo, donde se incluyen plazas para personas discapacitadas.

Sin embargo, en estos espacios no se aborda el tema de la necesidad que tienen —inclusive las personas discapacitadas— que ya están laborando, de que sus espacios laborales estén libres de tratos discriminatorios y los cuales pueden convertirse en la motivación para que este “cáncer social” avance, dijo.

“Tal y como está la situación económica, podemos decir que cualquier hogar requiere una fuente de ingresos. En el caso de las personas discapacitadas con mayor razón. Tenemos alrededor de 26 mil personas que serían felices si alguien, alguna institución o algún empresario, les brindara al menos una oportunidad y justamente por eso es que trabajamos”, apuntó Rincón.

En días pasados en Querétaro se organizó un Congreso Nacional de Inclusión Laboral para Discapacitados, el cual participaron especialistas, como Rosario Marín, promotora de la no discriminación en Estados Unidos; además de Javier Hernández Valencia, representante en México de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

Google News

TEMAS RELACIONADOS