Metrópoli

Festividad que resurge tras abandono

Festividad que resurge tras abandono
04/05/2013 |00:53
Redacción Querétaro
Pendiente este autorVer perfil

Como es tradición, cientos de habitantes de San Juan del Río y de su barrio La Cruz celebraron este viernes a la Santa Cruz, festejos que tienen como escenario estelar la pirámide del barrio y las danzas. En el Jardín Independencia también se apreciaron las danzas de concheros.

Aunque los festejos de la Cruz son parte de la tradición católica, la participación de los habitantes de el barrio de La Cruz ha sido fundamental para que en San Juan del Río prevalezca el fervor y la fe, y es que familias enteras de la localidad contribuyen a hacer del 3 de mayo una de las fechas con mayor presencia de fieles en calles de la localidad, pero también en el jardín principal de la cabecera municipal.

El barrio de La Cruz, cuenta con por lo menos tres grupos de danza de concheros que participan lo mismo en el festejo, que en la fiesta conmemorativa de la fundación de San Juan del Río.

La peculiaridad del barrio de La Cruz radica en que fue en el corazón de esta comunidad donde comienza la fundación de San Juan del Río; sin embargo, durante muchos años estuvo deshabitado.

Fue en los años 60, cuando familias provenientes de La Cañada y de Hércules, en la ciudad de Querétaro, deciden emigrar a San Juan del Río y se traen consigo la tradición de las danzas de concheros y los festejos a la Cruz; que ahora visten cada año a las festividades del 3 de mayo y de la fundación del municipio.

“Si bien es cierto que el barrio de La Cruz es el lugar donde surge San Juan del Río, esta zona por mucho tiempo estuvo abandonada y las fiestas actuales se originan de la repoblación del lugar, son fiestas contemporáneas en las que se sincretiza la devoción religiosa del 3 de mayo, es el encuentro de la Santa Cruz, pero también darle reconocimiento a esta zona del barrio”, explicó Francisco Pájaro, representante de actividades de la parroquia de San Juan del Río.

De esta manera, las ya tradicionales y añejas danzas de concheros, en las que participan niños jóvenes y adultos, son costumbre y tradición traídas de familias de la ciudad de Querétaro, propiamente de La Cañada y de Hércules.

Durante ocho días de festejos, los habitantes del barrio se organizan para ofrecer a las familias del lugar y a los visitantes del resto del municipio atractivos eventos, enmarcados con las tradiciones de esta vieja comunidad con pocos años de ser poblada.