En estos tiempos en los que los filmes del pasado inmediato se rehacen, ¿puede conservarse el mismo nivel de genialidad en la historia escrita y dibujada por Mike Mignola, que filmara Guillermo del Toro como Hellboy (2004) y Hellboy II, el ejército dorado (2008)? Sí. Hellboy (2019), quinto filme de Neil Marshall inspirado en los cómics de Mignola, La oscuridad llama, La cacería salvaje & La tormenta y la furia, que narran el enfrentamiento de Hellboy y la sanguinaria Nimue (Milla Jovovich). No es una tercera parte sino la mitología actualizada de Hellboy, que recupera los sombríos humor y ambiente del cómic.

Buscando capitalizar el éxito de otros héroes hechos para público adulto, como Deadpool y Kick-Ass, Marshall, experto en terror y acción, hace una cinta violenta pero divertida. Con la novedad de quitarle el aura súper heroica a Hellboy (David Harbour, con maquillaje mejor elaborado, detallado, hiperreal), para regresarle su condición demoniaca. Marshall se aparta de las ideas de Del Toro, impone las suyas y preserva el legado de las novelas gráficas. Su idea, próxima al género del horror, funciona. La aún no dominante empresa de cómics Dark Horse demuestra al fin que Marvel & DC tienen digna competencia.

Lo mejor de la Muestra 66. Ante la saturación de comerciales películas hollywoodenses y babosas comedias mexicanas, la Muestra 66 de Cine propone un cine casi marginal de gran calidad estético-dramática. De las 14 programadas, a circular entre el 12 de abril y el 18 de mayo en varias sedes de la CDMX, destacan estas auténticas joyas.

Jamás llegarán a viejos (2018, Peter Jackson), documental insólito que remodela imágenes de hace un siglo bajo resguardo del Museo Imperial de la Guerra. Jackson las colorea y usa el arsenal de efectos visuales por él creado a través de los años para conmemorar el centenario de la Primera Guerra Mundial; reconstruye la vida cotidiana de las tropas. Esta crónica apegada a lo sucedido durante 1914 & 1918 deja sin aliento.

Otro documental impresionante es el retrato que hace el debutante director Tom Volf, fotógrafo de profesión, en María por Callas (2017). Tuvo el ojo y la paciencia para encontrar en otros documentales, programas de televisión y especialmente filmaciones caseras, detalles apenas estudiados en la vida y trayectoria de la Callas. La cinta incluye los escritos personales de la diva en voz de la mezzosoprano Joyce DiDonato. Logra con ello una inédita semblanza íntima de la insuperable cantante de ópera, aún vigente, al decir de Volf y su carta de amor y admiración hecha con imágenes.

Continuando con la Primera Guerra Mundial, la notable obra Atardecer (2018, Lászlo Nemes, ganador del Oscar a Mejor Película Extranjera por El hijo de Saúl), ambientada en 1913, muestra elementos sociales y existenciales previos a la caída del imperio austro-húngaro. Seco melodrama de misterio, es un mural en movimiento acerca de las pesadillas de la Historia. Espléndida y fresca.

Por último, se presenta en copia restaurada Ven y mira (1985, título con el que concluyó su carrera Elem Klímov), que muestra a Floria (Alekséi Krávchenko) uniéndose a la resistencia soviética durante la II Guerra Mundial. Su esplendor visual lo hacen un filme de impacto duradero, imposible de olvidar. Verdadera lección de cine sobre el horror y la crueldad padecida en carne viva a lo largo de la guerra más brutal en la historia humana, comprueba por qué las obras maestras nunca envejecen.

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