Por los problemas de inseguridad que vive el país, las empresas que se dedican al blindaje de vehículos han encontrado un creciente mercado nacional, que llega a pagar hasta cerca de 1.5 millones de pesos para protegerse de un posible ataque con armas de fuego de alto calibre.
El blindaje, con la utilización de una tecnología de punta y de materiales ligeros, incluye la carrocería, plataforma, motor, llantas y cristales de los vehículos.
En México hay tres tipos de blindaje para vehículos que son los que más demanda comercial tienen: niveles 3, 4 y 5, revela Blindajes Alemanes, empresa que tiene más de 20 años en el mercado mexicano, y que nace de una alianza en 1996 con Wendler, firma alemana que trae tecnología de dicho país y la adapta el mercado latinoamericano.
En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, Mauricio Garibaldi Sánchez, director comercial de Blindajes Alemanes, explica que el nivel 3 de seguridad está diseñado para proteger a los tripulantes de una unidad, principalmente de un arma como la mágnum 44, cuando son víctimas de lo que se conoce como un asalto urbano.
Este tipo de blindaje, comenta Garibaldi Sánchez, tiene mayor demanda en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México y en otras entidades cercanas, como es el caso de Querétaro.
“Tenemos clientes prácticamente en toda la República, en Querétaro tenemos clientes con niveles 3, 4 y 5, pero hay mayor demanda con el nivel 3, eso es un reflejo de que ahí se apega más a lo que sucede en el mercado de la zona metropolitana de la ciudad de México”.
El nivel 4, abundó, cubre a los tripulantes de un vehículo de balas de una arma que es la AK47 que se conoce como un “cuerno de chivo”, mientras que el nivel 5 cubre contra armas largas como son los rifles AR-15.
Los niveles 4 y 5 de protección tienen más demanda en el Occidente, algunas áreas del Bajío y en el Norte del país, “es donde se concentra más, por ejemplo en Jalisco casi no vendemos niveles 3 y por otro lado reitero, hay poco porcentaje de demanda del nivel 5 en la ciudad de México” y también en entidades cercanas como Querétaro.
Los vehículos que más se blindan, dice, son las unidades tipo Suv, que son las camionetas, “pero básicamente son Cherokee, Suburban, Tahoe, esos tres vehículos cubren alrededor del 80% y de ahí vienen otros vehículos que también tienen una demanda mucho menor”.
El costo por blindar un vehículo con el nivel 3 de seguridad es de 34 mil dólares, moneda que si se le considera en 19 pesos como base en el tipo de cambio, el ejercicio aritmético, indica que se tiene que pagar 646 mil pesos mexicanos (cantidad a la cual se le agrega el pago de los impuestos respectivos), por este servicio.
Este precio que se tiene en el blindaje, explicó, se ha venido depreciando en el mercado debido a que se tienen los mismos precios desde hace 10 años: “es una industria que está muy ligada al tipo de cambio, por eso hasta hemos bajado los precios, adicionalmente de que hay muchos competidores”.
Un vehículo con el nivel 4 tiene un precio de 55 mil dólares (millón 45 mil pesos mexicanos) y el nivel 5 cuesta 75 mil dólares (millón 425 mil pesos mexicanos).
Los materiales que se utilizan para el blindaje son traídos de otras partes del mundo. Los blindadores importan el 90% de los materiales con los que se trabajan, lo único nacional que se emplea son tornillos y mano de obra.
Por eso las ventas que realizan, puntualizó, se hacen en dólares, debido a que la gran mayoría de los materiales son importados, entre ellos el acero, fibra aramida y resortes.
Inseguridad favorece a blindadores
El tema de la inseguridad se convirtió en un problema que preocupa y por eso invierten muchas familias o empresas en proteger sus vehículos, dice el director comercial de Blindajes Alemanes
“El blindaje también inhibe, porque la gente que conoce de blindaje identifica los vehículos blindados, entonces prácticamente no hay incidentes en los vehículos blindados porque es una inversión que se hace para inhibir una situación, evidentemente funciona”.
¿Se escucha crudo decirlo, pero en la medida en que se incremente la inseguridad a ustedes les irá mejor en términos comerciales? Se le pregunta a Garibaldi Sánchez.
-Desafortunadamente sí, pero nosotros lo que cada vez estamos buscando es ofrecer cada vez más alternativas para cubrir un mayor porcentaje de clientes.
En 2017, refirió que el 23% de quienes adquirieron un blindaje con esta empresa son clientes nuevos, “antes no usaban un blindaje, eso quiere decir que (nuestros servicios) sí están muy relacionados a la inseguridad”.
Con el tema de la inseguridad que se vive en México, dijo, se empezó a tener demanda de parte clientes que requerían una unidad el mismo día que solicitaban el servicio, “es la gente que tuvo un incidente, que tiene la necesidad de una protección inmediata y que nosotros vimos que teníamos capacidad de satisfacer”.
Es por eso que desde hace un par de años, Blindajes Alemanes también compra los vehículos y los blinda para posteriormente venderlos de entrega inmediata “y no es lo mismo que un cliente espere alrededor de 10 semanas para recibir su vehículo”.
Anteriormente se pensaba que altos funcionarios de gobierno o altos ejecutivos eran básicamente los clientes, pero derivado de la inseguridad que vive el país, “hoy el mercado está más diversificado, debido que tenemos desde profesionistas independientes o comerciantes de cualquier ramo, pues el que usa un blindaje va más relacionado con la satisfacción de buscar una protección”, destacó.
Nuevo nicho de mercado
El objetivo de esta empresa es diseñar una estrategia comercial que ofrezca a los consumidores cada vez más alternativas para cubrir un mayor segmento de la población “y llegar con aquellas gentes que tienen una necesidad de protección, pero que económicamente no lo pueden hacer”.
Por eso Blindajes Alemanes ya contempla mover el mercado a niveles de protección más limitados pero mucho más bajos en costo para que sea mayor el porcentaje de quienes compran un blindaje.
Una opción es proteger vehículos compactos, uno de ellos es el Jetta, debido a que es un modelo en el que el blindaje pesa 220 kilogramos, además de que se ofrece la más alta seguridad y también es muy ligero, “entonces en cuestión de precios, es accesible y para este año esperamos darlo más barato el blindaje para este vehículo”.
Otro modelo que se trabaja es el Mazda 5, que también da resultados comerciales en nivel 3, “estamos buscando diferentes alternativas al mercado, pues ajustar el precio hacia abajo incrementa la demanda”.
Una opción a futuro en México, adelantó, será blindar las unidades de manera parcial en niveles 3, donde únicamente se protejan puertas o cristales, “para acaparar un mercado que hoy no se atiene por situaciones económicas. Este blindaje es más barato y es muy utilizado en países como Brasil”.
Contracción comercial
A finales de 2015 cuando vino muy fuerte el incremento en el tipo de cambio, expuso, le pegó a la industria, al grado que cayeron las ventas en un 16%, porcentaje ya recuperado en los últimos dos años, “en 2017 se tuvo un crecimiento del 9%, que si suma a lo que alcanzó en 2016 ya se tiene una recuperación de lo que se perdió en 2015”.
Puntualizó que el blindaje de vehículos en el país es una industria que en los últimos diez años se cuadriplicó, pero también vale decir que se tiene un mercado muy pequeño, pues se estima que 0.2% de los vehículos que se venden se blindan, “entonces es un mercado muy pequeño; no es algo que se dispare, pero que sí ha venido creciendo con la inseguridad”.
En el segundo semestre de 2017, dijo, se tuvo un crecimiento, sin embargo, en los últimos dos meses se observan efectos negativos que van muy ligados a la situación del país, que aunque hay una necesidad de protección en sus vehículos “es evidente de que nuestros clientes están teniendo problemas económicos porque hay una contracción económica en el país”.
La expectativa de Blindajes Alemanes es que las ventas se mantengan en los mismos niveles del año anterior, debido a las diversas estrategias comerciales que se tienen, entre ellas bajar precios o sacar nuevos productos de menor costo.
Los clientes cada vez buscan materiales más ligeros y evidentemente buscan pagar menos, eso hace que la industria tenga un reto importante, debido a que un material más ligero cuesta más.
Utilizan tecnología de punta
Se trabaja también con programas sofisticados, entre ellos cortados con sistemas de plasma, láser, con piezas troqueladas y termoformadas que proporcionan una mejor cobertura balística con menor número de piezas, evitando el trabajo artesanal que genera variación en la calidad y en los terminados”.
En el blindaje de vehículos, la compañía utiliza tecnología alemana, que consiste en trabajar piezas termoformadas y troqueladas. Además de que es la única empresa en México que atornilla las piezas termoformadas.
“Nosotros hemos aprendido sobre las pruebas balísticas que se le han hecho a los vehículos, que la única forma de detener un impacto de bala en el borde de una fibra es atornillándolo, ya que si no se hace así tenemos en efecto como orilla libre, que cuando hay un impacto de bala si no está atornillado se mete la bala”.
Las pruebas balísticas se han hecho en Alemania y se tienen los documentos de los vehículos que se han certificado.
“No se hacen pruebas balísticas en México, la autoridad no lo permite, pero se utilizan materiales certificados, nosotros contamos con los certificados de los proveedores, pero además se hicieron pruebas balísticas sobre los vehículos”.
Blindajes Alemanes emplea 220 personas y es una de las ocho empresas que se encuentran afiliadas a la Asociación Mexicana de Blindadores de Automotores (AMBA), “aunque hay más de 50 blindadores del país que no están afiliados”, dijo.
El blindaje es una industria, subrayó, que no está regulada, las empresas que están en la AMBA son las que tienen un permiso del gobierno federal, que les entrega una carta de autenticidad con un holograma que “garantiza que el vehículo se protege con una empresa certificada y con calidad.
“Se corre el riesgo de que el blindaje no funcione cuando lo hagan con una empresa no certificada”, dijo Garibaldi Sánchez.