Noche de perros para Christian Giménez, quien tuvo un juego para el olvido, pero el Cruz Azul clasificó en la Copa MX, al derrotar a los Tigres (2-1).
El Chaco, último símbolo cementero, lleno de clase y pundonor, demostró que trae la suerte de espaldas al fallar un penalti y un remate en plena área chica que le pudo costar el juego al Cruz Azul, pero ahora sus compañeros dieron la cara por él.
Juego con muchas ausencias y pasado por una gran tormenta que hizo de la cancha del estadio Azul una piscina. André-Pierre Gignac aprovechó esas condiciones para anotar el primero.
La lluvia provocó lesiones, como la de Víctor Zúñiga, quien se estrelló con una silla y salió conmocionado. Enrique Palos también resintió el estado del terreno de juego.
Cuando todos esperaban un nuevo fracaso, ahora el “Momento Cruz Azul” fue al revés. Cerca del final, Martín Cauteruccio y Felipe Mora le dieron la vuelta al marcador, clasificaron a La Máquina y rescataron al Chaco de una noche de perros.