Para José Luis Trejo, el diagnóstico perfecto sobre lo sucedido en el estadio Olímpico Universitario es el que dicta una mitad gobernada por cada equipo, así es que considera que lo ideal habría sido repartición de puntos entre los Pumas y el Guadalajara.
“Al final, creo que un empate hubiese sido lo más justo, porque ellos tuvieron su oportunidad... Algunas otras también”, recuerda el técnico de los universitarios. “Nosotros, [contamos con] algunas, y una determinante [en los pies de Matías Britos], que pudo haber cambiado el curso del partido”.
La amargura del revés se acentúa por perder la racha de casi 10 años sin caer, en casa, ante el Rebaño Sagrado.
“Indudablemente que a nadie le gusta [ya no tener esa hegemonía], sobre todo cómo se dieron las cosas”, sentencia.