La noche en que Rafael Márquez volvió a las canchas se tornó agria porque Atlas cayó nuevamente con Guadalajara en los octavos de final de la Copa MX.

Un gol fue suficiente para que las Chivas dieran cuenta de los Rojinegros. Al minuto 24, Hedgardo Marín se levantó para peinar el balón con la cabeza y techar al portero Miguel Fraga. Tanto que decidió el juego, aunque la historia no se cuenta al final tan fácilmente.

Ahora el chiverío se verá en los cuartos de final frente a otro de sus viejos enemigos, el Atlante, que dio la sorpresa al eliminar al Toluca en serie de penaltis.

Eso es lo que le espera al Rebaño, pero ya dio cuenta del Atlas.

De su acérrimo rival.

Fue un primer tiempo para los rayados. Maniataron a los Zorros, que simplemente fueron inutilizados por la dinámica de los dirigidos por Matías Almeyda, sobre todo, gracias a gente como Javier López, quien dio la asistencia para el gol de Marín y de Rodolfo Pizarro, que cada partido que pasa se vuelve un jugador más importante.

José Guadalupe Cruz, técnico de los Rojinegros, se vio tan superado que decidió hacer cambios en la primera parte para controlar la media cancha. Le resultó, ya que Chivas no le pudo hacer más goles, y le dio tiempo para realizar un plan y tratar de empatar en la segunda parte. Casi se le da.

En el segundo tiempo, los Zorros dieron otra cara, y casi logran la hazaña. Por las bandas la juventud atlista comenzó a superar a la juventud del Guadalajara.

Tiros de todos lados llevaban odio y rencor a la portería del joven Miguel Jiménez, quien una vez más dio muestras de madurez y espectacularidad. Muchos hablan de que el portero será titular la próxima temporada en el Rebaño, por lo cual, la compra de Cota al Pachuca no se hará.

Jiménez atajó de todos lados. Se lanzó para desviar un tiro raso. Salió a achicar los intentos de mano a mano y por lo alto cortó todos los centros que le mandaban de ambos costados.

El arbitraje de César Ramos dejó mucho que desear, porque a pesar de que no hubo alguna jugada que incidiera en el marcador, en todo momento se notó que la tendencia era marcar a favor del Guadalajara, el local.

La noche en que Rafa Márquez volvió al futbol fue agria para el Atlas que otra vez perdió con su acérrimo rival. A Chivas le bastó un buen primer tiempo en ofensiva y un aceptable segundo en defensiva para dar cuenta de su principal enemigo local. Ahora la Copa puede ser el remanso rojiblanco en este semestre, donde la corona de Liga, está abolllada.

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