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Giovani dos Santos tomó una decisión en este 2015: abandonó el sueño europeo para fichar por el Galaxy de la MLS y el salario millonario que le paga.
Dejó el viejo continente, luego de no poder consolidarse en ninguno de los ocho equipos en que militó (Barcelona B, Barcelona, Tottenham Hotspur, Ipswich Town, Racing de Santander, Mallorca y Villarreal). Empacó sus maletas para desembarcar en la liga de Estados Unidos a cambio de cuatro millones de dólares por año. En el Villarreal, su último club en Europa, ganaba uno anualmente.
“Fue una decisición difícil venir a la MLS, pero vengo a jugar duro y a ganar títulos. Llego en el mejor momento de mi carrera y es un nuevo reto. Estoy contento porque la MLS es una gran liga”, afirmó al convertirse en compañero del estelar inglés, Steven Gerrard.
Recibió críticas ante el movimiento, pero dijo que “hay que quitarle a esta liga la etiqueta de que es chica”.
Rafael Márquez, Javier Aquino y Ulises Dávila también eligieron cambiar el balompié europeo. Esa tercia regresó al futbol mexicano con el Atlas, Tigres y Santos Laguna, respectivamente.
El ex de Cruz Azul lo hizo para convertirse en monarca del Apertura 2015, luego de tener una participación prácticamente anecdótica con el Rayo Vallecano y el Vilarreal en España.
Márquez y Dávila retornaron recientemente para prepararse de cara al Clausura 2016.
Movimientos acertados. Miguel Layún, Héctor Moreno y Jesús Corona cambiaron de aires y, hasta el momento, les ha funcionado.
El ‘Tecatito’ dejó al Twente de Holanda, un equipo de media tabla, para enfilarse con el Porto, que es contendiente en Portugal y suele participar en la Champions League todos los años. Layún lo acompañó, luego de dejar al Watford de Inglaterra. El ex lateral del América ha sido constante con presencia en el marcador.
Moreno dejó al Espanyol para jugar Champions con el PSV.
