En el Cono Sur, Lionel Messi, Neymar y Alexis Sánchez encuentran el sufrimiento, pierden su magia. La razón es simple para Jorge Valdano: aquellos jugadores habilidosos, que se dedican a embellecer al futbol, padecen ante la fiereza del juego en la Copa América.

El escritor y hoy analista de Fut Azteca hace esa lectura de lo que va de la presente edición del torneo de selecciones más antiguo del mundo. Las individualidades quedan opacadas ante el juego colectivo, aferrado a destruir.

“Estamos hablando del inicio de la Copa América. La lectura tiene que ser provisional. Ha sido muy igualada, con resultados muy cortos, con un gran sentido colectivo, que termina penalizando a las grandes individualidades y también al espectáculo”, describe quien fuera campeón del mundo en México 1986.

Messi, acostumbrado a ser múltiples goles con el Barcelona, ha marcado una vez en la presente Copa en dos partidos, por la vía del penalti.

Neymar tuvo un debut con anotación y asistencia frente a Perú, pero contra Colombia quedó anulado por el juego ríspido que le aplicaron, al grado de salir expulsado, luego de una bronca cuando el partido había expirado con derrota para la verdeamarela.

“Es un torneo interesante, como suele ser el futbol de Sudamérica. No hay que olvidar que están jugando varias de las máximas figuras de Europa como James [Rodríguez], el mismo Messi”, recuerda Valdano.

“A todos les cuesta más trabajo que en Europa hacer pesar su talento. Es un futbol que no resulta fácil. En palmos de los partidos no resulta agradable para los ojos, pero tampoco para aquellos que lo juegan”, señala.

El ex seleccionado de la albiceleste ejemplifica que la ‘Pulga’ tiene menos contacto con el balón que en su club, donde es el referente blaugrana. Circunstancia que provoca menor brillo del astro culé con su país.

“Hay que tener en cuenta de que en el Barcelona, el número de intervenciones de Messi es muy superior a las que tiene en Argentina”, apunta.

Concluye: “Es posible que los defensores europeos tengan un punto más de ingenuidad que los defensores sudamericanos. Aquí hay oficio, picardía, juego subterráneo. Eso dificulta la expresión del talento”, explica.

Messi, un genio de época. Valdano evita el debate que han generado las comparaciones entre Lionel Messi y Diego Armando Maradona.

El ex directivo del Real Madrid prefiere describir al actual estandarte de la Argentina como uno de esos “genios que nacen cada 20 años.

“De Messi hay que aclarar que ya lleva en la selección mucho más goles que nadie y en el Barcelona más títulos que todos”, evidencia.

“No veo cada partido de Messi en la selección argentina como si se tratara de un examen. Si analizamos su carrera, que ya lleva 10 años, lo de Messi ya es deslumbrante, ya merece un lugar entre los mejores de la historia del futbol”, alaba.

Mejor que Pelé o el mismo Maradona no es una definición que Valdano quiera hacer. Messi lo ha ganado todo con el Barcelona español, pero batalla para conquistar un título con el combinado argentino. Edson Arantes y Diego Armando sí se encumbraron con la camiseta de sus respectivas naciones.

Pero “yo no voy a las comparaciones, cada uno de ellos son los más representativos de una época e indican que los genios, como Messi, nacen una vez cada 20 años”.

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