La subcampeona olímpica Guadalupe González va por un doble festejo el 13 de agosto.
La andarina, ganadora de plata en los 20 kilómetros de Río de Janeiro 2016, sueña con darle a México una medalla en el Campeonato Mundial de Atletismo que se celebra en Londres y ofrecer la presea a su padre, quien ese día celebra su cumpleaños.
“Estoy ilusionada con tener una gran jornada y alcanzar la presea que falta en mi vitrina. El Mundial es la competencia en la que no he podido estar y quisiera debutar con el pie derecho. Ha sido un gran año, inicié bien y espero terminarlo de la misma forma, con un gran regalo para mi padre”, dijo Lupita, quien ayer por la noche viajó a la capi-tal inglesa.
La también campeona panamericana tiene bien definida su estrategia de competencia.
“Pienso que en mi caso, siempre debo salir con el primer grupo porque si me quedo desde el principio de la prueba me siento ahogada por la presión de que ya se me van. Tengo estudiados varios escenarios que pueden suceder después del kilómetro 10”, explicó.
La marchista se preparó tanto en Toluca como en el Centro Ceremonia Otomí.
“Me siento bien, realicé todo el trabajo necesario y voy con la esperanza de que todo se vea reflejado en la competencia. La rodilla no está al cien por ciento, pero no es algo que limite mis aspiraciones. Ojalá pueda lograr mi meta porque sería muy alentador para el inicio del ciclo olímpico”, añadió Lupita, quien en caso de subir al podio también dedicaría su triunfo a su médico, quien falleció hace algunas semanas.
“Él anhelaba estar conmigo en Londres y siempre estuvo pendiente de mi lesión, esta competencia también se la dedico a él”.
La andarina viajó con su equipo de trabajo, encabezado por su entrenador Esteban Santos.
“Me he sentido muy bien con su forma de trabajo y creo que eso se ha reflejado en los resultados que he tenido en mis tres últimas competencias; ojalá el Mundial no sea la excepción. Su forma de prepararme es un poco diferente a la que tenía anteriormente, pero creo que me he acoplado bien”.
Aunque confía plenamente en su preparación, González conserva un poco de mesura y dijo que no se siente favorita.