El Bosque de Chapultepec se convirtió ayer en una sede alterna para aquellos que no lograron asistir al Gran Premio de México.

A falta de boletos, cientos de personas se dieron cita en el Monumento a los Niños Héroes, donde fue acondicionada un área para contemplar el regreso del Gran Circo a nuestro país.

Pantalla gigante, zona de go karts, simuladores, autos de exhibición y diversas actividades relacionadas con Fórmula Uno fueron algunas de las atracciones que disfrutaron los asistentes, mientras Nico Rosberg, Lewis Hamilton y Valtteri Bottas se disputaban los primeros tres sitios en el podio.

Los primeros en llegar a la Fan Zone fueron los más afortunados, al conseguir una de las pocas mesas instaladas bajo la sombra de frondosos árboles. Los demás, aquellos que arribaron poco después del mediodía, tuvieron que conformarse con observar la carrera sentados en el suelo.

“No pudimos comprar boletos, pues el precio estaba elevado para nosotros. Aún así decidimos venir a apoyar a ‘Checo’ Pérez aunque fuera a la distancia”, confesó don Julián Montes, quien junto con su esposa y sus dos hijos asistió a la celebración.

En una calurosa mañana, los aficionados al deporte motor aprovecharon las primeras vueltas para vivir la experiencia de cambiar las llantas en pocos segundos. Los más pequeños se formaban una y otra vez para pilotar los go karts, que resultaron insuficientes ante la gran demanda.

Con incredulidad, los asistentes contemplaron el tempranero abandono del español Fernando Alonso y la sorpresiva salida de los autos Ferrrari conducidos por Sebastian Vettel y el finlandés Kimi Raikkonen.

Lo mejor vino después de la vuelta 65, cuando comenzaron a definirse los primeros sitios. Fue entonces cuando la mayoría de las personas se acercó a la pantalla para contemplar el emocionante colofón de los bólidos.

Nico Rosberg, Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, los tres primeros de la clasificación, se llevaron los aplausos. Pero fue el mexicano Sergio Pérez el más ovacionado por la animada afición.

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