Gustavo Ayón define a Querétaro como “una ciudad agradable” por lo que hace cinco años se instaló con su familia en la entidad, y ahora que tiene unos meses de descanso de la liga, aprovecha el tiempo para estar con su esposa y su hijo.

En charla con EL UNIVERSAL Querétaro en el restaurante de su esposa en el centro de la ciudad, Ayón Aguirre habló de su experiencia en el máximo circuito profesional de basquetbol en el mundo, de la incertidumbre que se vive en la liga, sobre sus planes a futuro, sobre lo que le hace falta a este deporte en México.

El tercer mexicano en llegar a la NBA, recordó cómo fue su experiencia de saber que jugaría en donde todo basquetbolista algún día sueña.

“En diciembre de 2011 tuve la oportunidad de recibir la llamada con la que me convocaron para la NBA. Viví una sensación de mucha alegría. Es un reto grande, que me ha costado trabajo, que me ha hecho sufrir, que me va hacer batallar pero que no es imposible teniendo voluntad y si se trabaja fuerte”, afirma el jugador de 2.06 metros de altura.

Luego de dos temporadas, la última con los Bucks de Milwaukee, Gustavo no quiere dejar de luchar por un lugar en la duela, aunque no es nada fácil.

“Yo quiero quedarme en la NBA, sigo soñando, sigo disfrutando el sueño con mi familia, lo vivo como si fuera el primer año que estoy allá, la sensación que te deja estar en la NBA es de mucha satisfacción, pero que requiere de muchos sacrificios, entrega y dedicación”, reconoció.

Ahora que la NBA está en finales, Ayón tiene como favorito al conjunto de Miami Heat, “pero no hay que minimizar lo que puede hacer Duncan, Parker, Ginobilli”, opinó.

Declaró que los jugadores tienen un futuro incierto en la NBA, cuando fue cuestionado sobre si le gustaría permanecer en los Bucks. “Todos vivimos una incertidumbre a menos que seas un Tony Parker o Lebron James, todos un día estamos en un equipo y en cualquier momento te pueden mover a otro, pero a mí sí me gustaría permanecer en este equipo en un nuevo ciclo que comenzará”.

Sobre el basquetbol mexicano, el jugador nacido en Tepic, Nayarit, aseguró que “le hace falta una estructura sólida, un plan de trabajo donde los niños sean la prioridad, porque tiene que entrenar, trabajar y ser mejores día con día.

“Yo ya me hice, Eduardo Nájera, Horacio Llamas, Lorenzo Mata, todos ellos ya se hicieron y van para afuera, la prioridad son los niños porque dentro de 15 años eso niños van a ir representando a México y poniendo en alto el nombre del país”, externó.

Uno de sus objetivos a corto plazo es mejorar su condición física para poder ser llamado a la selección nacional en las eliminatorias mundialistas y trabajar en equipo para conseguir el pase, algo que en 39 años no se ha logrado.

“Me tocaría verlo y ser parte de ello, sería otro sueño hecho realidad y se puede, claro que se puede, esperamos trabajar bien y después ir a la NBA y seguir trabajando”, finalizó.

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