El 11 de diciembre era un día como cualquier otro, la rutina de siempre: Yosheline, una joven de 18 años de edad, tenía que apresurarse para desayunar algo ligero y llegar temprano al gimnasio, después iría al trabajo y atendería sus pendientes escolares. Sin más se despidió de su mamá y salió corriendo para realizar todas las actividades de su día normal. Su rostro de grandes ojos y permanente sonrisa reflejaba sin duda alguna la alegría por la vida.

A las 10:35 de la mañana salió del gimnasio. Y después de eso nada, absolutamente nada. Yosheline desapareció de Constituyentes, una avenida muy transitada que conecta la capital del estado con el municipio conurbado de Corregidora, siendo además de las principales avenidas céntricas de Querétaro.

Yosheline se suma a la larga lista de desaparecidas y desaparecidos en nuestro estado. En la página electrónica de la Procuraduría General de Justicia de Querétaro existe el reporte de 37 mujeres adultas y 35 menores de edad desaparecidas; en dicha página puede ya leerse el nombre de Yosheline Arenas Heredia. En el apartado de desaparecidos también aparece el registro de 89 hombres adultos y 12 menores de edad. Sin embargo es de llamar la atención que falta el registro de Leonel González Ruiz, de 13 años, que desapareció el pasado 17 de noviembre en la comunidad de San Fandila en el municipio de Pedro Escobedo, por quien se activó la Alerta Amber sólo durante 11 días pero sique sin ser localizado.

El 11 de noviembre varias organizaciones de mujeres nos dimos a la tarea de solicitar la activación de la Alerta por Violencia de Género, motivo por el cual se conformó el equipo de trabajo multidisciplinario para investigar y encauzar dicha solicitud. La desaparición es una forma de violencia contra las mujeres, es por eso que los casos de Yosheline y de Leonel tendrán que ser tomados en cuenta para solicitar a las autoridades mejorar los protocolos de búsqueda y atención a las víctimas, así como a sus familiares.

MVZ Francisco Domínguez Servién, gobernador constitucional del estado de Querétaro; licenciado Alejandro Echeverría Cornejo, procurador del estado; licenciado Mauricio Kuri González, alcalde del municipio de Corregidora; Beatriz León Sotelo, alcaldesa del municipio de Pedro Escobedo, quisiera invitarlos a imaginar un segundo la angustia de las familias de Yosheline y de Leonel y de todas y todos los desaparecidos en Querétaro. La capacidad de empatía es una cualidad de políticos comprometidos con su quehacer público, que sumada a la conciencia hacia la alta responsabilidad encomendada por la sociedad les obliga a dar respuesta.

La mañana del día 12 de diciembre ya no era una como cualquier otra: la madre de Yosheline la sintió y la vivió como la más fría de su vida. Aunque los primeros rayos del sol anunciaban el término de la oscuridad de la noche, inexplicablemente la penumbra a su alrededor no desaparecía, sintió que la luz le dolía en los ojos, el aire en los pulmones y la tierra bajo sus pies también dolía; por momentos la desesperación y la incertidumbre parecen que no la dejan respirar, entonces el llanto es su manera de expresar el interminable dolor que está sintiendo. La conexión con su hija es indisoluble, es por eso que faltando una, la otra está incompleta, ella lo sabe, lo siente, lo vive, no descansará hasta encontrarla.

Nuestro corazón se encuentra con las madres de l@s desaparecid@s por lo que sumamos nuestra voz en la justa y urgente exigencia por su localización inmediata.

Presidenta de Desarrollo Comunitario para la Transformación Social. @AliciaColchadoA

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