En diversas ocasiones he expresado mi confianza en que el trabajo a favor de los más necesitados que realizamos quienes defendemos los principios de la Cuarta Transformación de la vida pública de México, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, permitirá revertir la enorme crisis de confianza de la sociedad mexicana, agraviada por décadas, en sus representantes populares y servidores públicos.

Esa desconfianza, producto de años de mentiras, saqueo, fraudes y una corrupción que pareció penetrar todos los niveles de las administraciones públicas locales, estatales y nacional, se volvió un reto para quienes asumimos la vocación del servicio público y decidimos poner en práctica una verdadera representación de los intereses ciudadanos, trabajando en distintos frentes para lograr el cambio que anhelábamos.

Con esto en mente, quienes decidimos enfrentar dicho reto, entendimos que era necesario brindar propuestas, ser transparentes en nuestras gestiones y, sobre todo, dar resultados tangibles, que impactaran benéfica y visiblemente a la ciudadanía, para que se convirtieran, sumados e integrados a la estrategia de desarrollo nacional que regula el gobierno federal y el trabajo de los gobiernos locales emanados de Morena y sus aliados, en las bases de la transformación que creemos posible.

Ciñéndome a ese compromiso, desde que asumí la honrosa representación de mi distrito como senador de la República en la 64 Legislatura, he propuesto una agenda legislativa que retoma las demandas y necesidades históricas de la sociedad de Querétaro y de otras regiones del país, para buscarles soluciones dentro del marco normativo y las capacidades de gestión que son de nuestra competencia.

Para lograrlo, he buscado mantener contacto directo con la gente y establecer lazos de colaboración con ella, porque tengo claro, como he mencionado en otras ocasiones, que representarlos y darles voz, es un honor y una responsabilidad muy grande que no nos pesa, sino que nos compromete aún más con la búsqueda incesante del logro de objetivos y la entrega de resultados.

Así, hemos propuesto iniciativas que, aún en lo sencillo de su formulación, ayudan a generar importantes ahorros a las administraciones y les permiten enfrentar con mayor solvencia sus gestiones, como por ejemplo, la iniciativa que permite a estados y municipios contar con las provisiones para el pago de prestaciones con motivo de la terminación laboral, por despidos y renuncias, de servidores públicos, prohibiendo que las administraciones salientes dejen pasivos por dichos conceptos que, en muchas ocasiones, se convertían en una gran merma para los planes presupuestarios de cualquier gobierno.

De igual forma, para ayudar a las instituciones a velar por la protección de la salud pública, propuse una iniciativa para dotar a la Secretaría de Salud federal de facultades para verificar que las autoridades competentes cumplan y verifiquen requisitos de distancia mínima para autorizar venta y consumo de bebidas alcohólicas, identifiquen su venta clandestina, implementen programas de prevención de alcoholismo en menores de edad y puedan emitir recomendaciones respecto al tema.

Asimismo, como informamos previamente, buscamos que los colaboradores de instituciones públicas de servicios médicos, seguridad y protección civil, reciban un salario preferente durante la contingencia sanitaria, en reconocimiento a su esfuerzo y compromiso, además de seguir luchando para que las autoridades estatales y municipales de todo el país, definan en su estructura a las autoridades específicas para la atención y seguimiento del grave problema que representa el trabajo infantil en situación de calle.

Por supuesto, me permito destacar nuevamente nuestra propuesta de la Ley General de Víctimas, con la que pretendemos que los integrantes del Sistema Nacional de Atención a Víctimas, cuenten con una “suplencia” estipulada en la normatividad, que permita que no se suspendan las sesiones de tan importante organismo y, no menos importante, la iniciativa de brindar seguridad social a los trabajadores del volante, choferes de taxi y otros servicios de transporte, para que cuenten con este importantísimo derecho.

Convencido de que esta Agenda Legislativa es propositiva e incluye iniciativas, reformas y propuestas de declaratoria que permiten abonar a los cambios graduales que forman parte de la transformación, estoy convencido que vamos a seguir trabajando en beneficio y al lado de la gente, hasta alcanzar la meta de superar los retos de la miseria y descuido que nos heredaron y de los que, afortunadamente, ya estamos en proceso de salir.

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