En términos generales el síndrome de abstinencia es el conjunto de efectos físicos y mentales que sufre el individuo que suspende la ingesta de una sustancia de la que tiene dependencia de tiempo atrás (adicción). Esta puede ser al alcohol o a las drogas.

Pero también existe el síndrome de abstinencia emocional, que se da al terminar una relación en la que existía codependencia.

Aunque la comparación pudiera ser para algunas personas exagerada los síntomas pueden llegar a ser los mismos cuando se está viviendo el Síndrome de abstinencia emocional.

¿Cuáles son los síntomas de la abstinencia emocional?

La persona que está viviendo una ruptura reciente, sobre todo de una relación en la que existía dependencia emocional, tiene dificultades para concentrarse, puede presentar depresión y/o ansiedad, insomnio, falta de apetito, irritabilidad y deseos poco controlados de buscar a la persona. Este periodo es de alta vulnerabilidad porque pudiera aceptar quedarse en una relación no sana, simplemente por el miedo a sufrir estos síntomas.

La duración de este periodo depende de la resiliencia de cada persona, algunas sólo lo viven algunos días posteriores a la ruptura y otros tardan semanas en procesar y aceptar la realidad de forma asertiva.

¿Qué hacer si se está viviendo este síndrome?

Lo más recomendable es reconocer la pérdida y vivir el duelo de la relación. Luego es aceptar que se está viviendo el síndrome de abstinencia emocional y buscar alternativas que nos ayuden a salir lo antes posible.

•    Poner distancia sana y tener contacto cero con la persona es un paso muy importante para que inicies a vivir de manera objetiva y sana tu proceso de duelo y el síndrome de abstinencia emocional.

•    Trata de seguir con tu rutina de responsabilidades cotidianas (escuela, trabajo, etc.)

•    Implementa rutinas recreativas en tu agenda, tales como: salir a caminar, ir al gimnasio, salir con amigos, leer un buen libro que ayude en el proceso.

•    Es muy importante cuidar nuestra dieta, ya que cuando vivimos este tipo de sucesos buscamos compensar, y en ocasiones lo hacemos mediante la comida o los excesos (tabaco, alcohol, etc.) 
•    Identifica la calidad de pensamientos que tienes, si son negativos, déjalos pasar y trata de cambiarlos a positivos.

•    Consiéntete, duerme lo suficiente.
 
•    Y si lo crees necesario, busca el apoyo de un especialista que te acompañe en el proceso.

Gracias por darte el tiempo de leer mi columna. Sigo al pendiente de tus comentarios y sugerencias, ¿qué tema te gustaría que abordara? Exprésate, para mí, es un placer compartir contigo… Linda vida. 
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Frase de la semana

“Solo por hoy, 
mi tarea más importante 
es amarme y aceptarme”

Libros recomendados:
—El camino del encuentro, de Jorge Bucay. 
—La maestría del amor, del Dr., Miguel Ruiz.

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