El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) ha sido de gran importancia para el desarrollo de nuestro país y de Querétaro. Su existencia ha permitido el fortalecimiento de instituciones educativas y de investigación en ciencia y tecnología, así como para la formación de capital humano e infraestructura para la innovación que hace viable que el país establezca mejores condiciones para elevar la calidad de vida de la población.

La creación del Conacyt, publicada el 29 de diciembre de 1970 en el Diario Oficial de la Federación, fue con el propósito de formular programas para enfrentar la problemática del aprovechamiento de los recursos naturales, instrumentar acciones para solucionar las deficiencias en salud, alimentación, producción agropecuaria, industrialización, educación, desarrollo rural y descentralización de la investigación mediante la creación de centros de investigación en México, lo que llevó a que en 1976 se fundaran 15 centros de investigación distribuidos en diversas regiones del país.

Sus funciones son múltiples e incluyen el otorgamiento de becas para estudios de posgrado a realizarse en México o en el extranjero, estancias sabáticas y posdoctorales nacionales, enlaces laborales, así como el desarrollo de programas nacionales de posgrado de calidad.

El Conacyt es un organismo público descentralizado del gobierno federal para promover el avance de la investigación científica, la innovación, el desarrollo y la modernización tecnológica del país; cuenta con personalidad jurídica y patrimonio propio, con autonomía técnica, operativa y administrativa.

La inversión en educación es componente fundamental del sistema estratégico para el desarrollo nacional y su adecuada inclusión en el mercado mundial, así como también lo es la inversión en desarrollo científico y tecnológico, como indicadores de la realidad nacional.

El fortalecimiento de las universidades del país ha sido posible, en buena medida, gracias a la existencia del Conacyt, que ha permitido la formación de recursos humanos de alto nivel a través de los estudios de posgrado, profesionistas que con el apoyo de las becas han realizado estudios de maestría, doctorado y posdoctorado, tanto en el país como en el extranjero. En la década de los 70, se tuvieron mejores condiciones para que más maestros llevaran a cabo estudios de profundización en el conocimiento y la realización de investigación en instituciones de prestigio, para así reforzar académicamente su labor en las universidades mexicanas, pero también en beneficio de la administración pública y del sector productivo. Gran proporción de los profesores investigadores de la UAQ fuimos becarios del Conacyt.

Las Instituciones de Educación Superior, especialmente a partir de esa década, brindaron apoyo para que sus docentes llevaran a cabo estudios de posgrado, disponiendo de sus recursos presupuestales y a través de convenios con otras instituciones; asimismo, se agregaron apoyos significativos de la Secretaría de Educación Pública, mediante el programa de mejoramiento del profesorado.

Yo fui un becario del Conacyt, mi gratitud perenne para mi familia, para la UAQ, para la UNAM, a Querétaro, a mi país y para el Conacyt.

Ex Rector de la UAQ. 
zepeda@uaq.mx  
jalfredozg@yahoo.com.mx

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