Sigamos investigando por qué subes de peso, y también por qué te es tan difícil de bajar esos kilos de más.
Sé que hay quienes consideran que su exceso de peso es por alguna enfermedad, que su metabolismo está desajustado y por ello no bajan de peso. En algunos casos, puede ser cierto, sin embargo, son la menor de las causas para la obesidad que se va incrementando actualmente. Aun cuando hay enfermedades que promueven ganar kilos de más, no es el caso de todo el mundo, y a continuación te explico por qué.
Hormonas. Algunas enfermedades son causadas por alteraciones en las glándulas (como la tiroides, la más famosa por afectar el peso) y estas glándulas producen exceso o deficiencia de algunas hormonas. Lo más común es que se padezca hipotiroidismo y por ello, el metabolismo se vuelva lento y toda la energía que se recibe a través de los alimentos en lugar de utilizarse, se convierte en grasa y se almacena en nuestro cuerpo. Además de las tiroideas, hay otras hormonas, que conocemos más por el nombre de la enfermedad: síndrome hipotalámico, síndrome de Cushing, hipotiroidismo, síndrome de ovarios poliquísticos, hipogonadismo, deficiencia de hormona del crecimiento, pseudohipoparatiroidismo, que afectan a nuestro organismo haciendo que se aumente de peso.
Órganos. En algunos casos un mal funcionamiento del hígado puede afectar el metabolismo de la energía que comemos y por ello almacenarla mal, puede ser una enfermedad directa en el hígado o que por una alimentación excesiva, el hígado comience a fallar y a trabajar con “errores”, como almacenar demasiada grasa (aquí se forma el hígado graso). También una mala digestión de los alimentos a nivel intestinal pueden provocar una absorción de nutrimentos, con lo cual se promueve la obesidad, además se ha estudiado recientemente que la microbiota intestinal (lo que antes llamábamos flora intestinal) influye mucho en la obesidad, si predomina un tipo de microorganismos podemos ser propensos a subir de peso.
Genes. Algunas alteraciones cromosómicas promueven la obesidad, por la misma alteración en los genes del individuo. En humanos, existen síndromes genéticos claramente identificados en los que la obesidad es característica (por ejemplo, el síndrome de Prader-Willi y el síndrome de Bardet-Biedl. Sin embargo, las alteraciones genéticas relacionadas con la obesidad sólo se han identificado en muy pocos individuos.
Antes de que supongas que esto es lo que te pasa, necesito que aprendas que, además de la ganancia de peso excesiva, se presentan más síntomas notorios, alteraciones que van desde cambio de textura en piel o cabello, poca energía para realizar cualquier actividad, alteraciones del sueño, digestión, desarrollo, e incluso la presencia de algún síndrome, como el de Down.
Para los casos que sí pueden tener datos de obesidad por alguna alteración hormonal, les invito a acercarse a un Endocrinólogo, que es el especialista indicado para estos casos. En Querétaro puedo recomendarles al Dr. Juan Villagordoa o a la Dra. Ludivina Robles, ambos excelentes médicos con un diagnóstico muy acertado.
Ya viste las causas que pueden producir tu ganancia de peso, ¿ya sabes cuál es tu situación? Si es así, acércate a algún nutriólogo, entrenador físico o endocrinólogo para que te apoyen en este proceso de alcanzar una mejor calidad de vida.
La próxima semana hablamos sobre nutrición y deporte, ¡no te lo pierdas!
