Hace poco más de 17 años nació el Distintivo ESR (Empresa Socialmente Responsable) con el objetivo de mejorar la forma de hacer negocios en México. Su impacto trascendió fronteras y hoy es un reconocimiento que ostentan muchas organizaciones de América Latina, quienes ven en este premio una forma de alinear sus operaciones hacia la sostenibilidad, es decir, que lo hagan con ética y transparencia, que impacten positivamente en el desarrollo social y que cuiden y protejan el medio ambiente.

De acuerdo con información del propio Centro Mexicano para la Filantropía (CEMEFI), mil 354 organizaciones empresariales establecidas en México obtuvieron el reconocimiento este año, teniendo un incremento que superó el 10% en número de participantes, respecto al año precedente.

Pero, ¿por qué buscan las empresas ser socialmente responsables?... pudiera ser por reputación corporativa, porque se los pide algún cliente con el que trabajan o porque en verdad existe convencimiento de que es el camino para crecer y trascender. En esencia todas las empresas deberían considerarse socialmente responsables, al generar empleos y riqueza para sus socios, inversionistas y el país en donde estén establecidas, sin embargo, esa encomienda ha trascendido estos límites. La práctica de la RSE es buscar ser sustentables o sostenibles, lo que significa ir más allá de las obligaciones que por Ley corresponden, para no afectar con su operación a las presentes y futuras generaciones.

Ser una ESR tiene grandes beneficios, como ya lo hemos visto en colaboraciones anteriores. Sin embargo, son pocas las organizaciones que se suman a esta filosofía empresarial, donde el principal obstáculo a superar es el convencimiento pleno de sus directivos, quienes muchas veces lo ven como “sólo un gasto más”, sin darse cuenta que el fondo y la forma de hacer negocios ha cambiado y está transformándose en un esquema que debe ver por la ética empresarial, la calidad de vida de los colaboradores, el apoyo al desarrollo social de los sectores más vulnerables y al cuidado y protección del medio ambiente.

Diversos estudios aseveran que el Retorno de la Inversión Sustentable impacta positivamente no sólo en la facturación del negocio, la cual en algunas Pymes ha llegado a superar los 3 dígitos, según el Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM), sino que también favorece en la fidelidad que se tiene de los colaboradores hacia

la propia empresa, al brindar oportunidades internas de desarrollo profesional, personal y familiar, independientemente del compromiso que se asume con los programas de desarrollo social y ambiental que la organización lleve a cabo.

Hoy la empresa socialmente responsable es una realidad. Quienes ya tienen este reconocimiento se han consolidado como organizaciones serias, que marcan las pautas para las que vienen detrás. Si bien es un reconocimiento, hoy la sociedad demanda más organizaciones comprometidas que ayuden a mejorar la percepción que se tiene de las empresas y la generación de riqueza.

Cifras de la RSE

1.- La Fundación American Express participó activamente con la Fundación Olga y Rufino Tamayo para reacondicionar y remodelar los accesos al recinto cultural que se encuentra en el viejo bosque de Chapultepec. La firma bancaria, en diversas oportunidades, ha hecho patente su compromiso con el desarrollo social, cultural y ambiental del país, acciones que forman parte de su filosofía corporativa. De esta forma, rehabilitaron la pavimentación del corredor, el alumbramiento del corredor Reforma – Museo Rufino Tamayo y las cercas que protegen a los árboles circundantes al recinto.

2.- La farmacéutica británica Glaxo, con presencia en México, está dando de qué hablar. Después de haber sido multada en diversas ocasiones por causas de conflicto de interés, poco a poco se ha desligado de los pagos a médicos por promover el uso de sus productos y a cambio, ha generado una plataforma online para capacitarles y mostrarles las bondades de sus medicamentos, yendo más allá de la simple explicación y capacitándoles en temas puntuales como pediatría, dermatología, psiquiatría y medicina interna. A la fecha, tan sólo en México, cuenta con más de 32 mil suscriptores que reciben información y capacitación puntual.

3.- Y mientras la industria minera del cobre sigue padeciendo los estragos de la caída en los precios del metal, el International Cooper Study Group, con sede en Europa, asevera que un tercio del cobre que se consume en el mundo proviene de fuentes del reciclaje, lo que ha repercutido positivamente en disminuir los consumos de electricidad en casi 100 millones de MWh y dejar de emitir a la atmósfera 40 millones de toneladas de CO2 cada año. Desde 2014 está tendencia se ha ido acentuando, lo que sin duda habla bien de este sector que ya se encuentra en la economía circular.

Hasta la próxima ronda de Negocios Sustentables.

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