Estamos prácticamente en el último respiro de la actual administración estatal, esta será recordada por diferentes razones, una puede ser su intolerancia a la protesta social y a cualquier persona u organización que difiera de su postura, otra su falta de sensibilidad ante la precariedad que se vive en Querétaro, pero en especial será recordado por sus promesas incumplidas que terminaron siendo sólo publicidad electoral, palabras vacías y discursos coyunturales.

Muestra de ello ha sido la constante existente en la aprobación de los últimos presupuestos estatales en donde Gobierno del Estado no ha cumplido con su palabra de no fallarle a las y los universitarios. Hemos sido testigos de cómo los pretextos insostenibles es lo único que impera al momento de cuestionarlo al Ejecutivo sobre el aumento prometido a la Máxima Casa de Estudios de Querétaro.

Poco le ha importado las constantes protestas estudiantiles en donde se exige un presupuesto justo y suficiente para la institución de educación pública superior más importante de nuestra entidad, de hecho este año se hubiera hecho sentir nuevamente la molestia de la comunidad universitaria de no ser por la presente contingencia que vivimos a causa de la pandemia.

Y es que durante un lustro se le ha hecho de su conocimiento el trabajo que las y los estudiantes, administrativos y personal docente realizan día con día por brindar un servicio académico caracterizado por la excelencia, proyectos y trabajos de investigación del más alto nivel y sobre todo como la UAQ tiene injerencia en la vida de todos las y los queretanos.

Sin embargo y aunque los datos relacionados siempre han sido del conocimiento de la actual administración estatal, la realidad es que siempre se han empeñado en tergiversar la información relacionada con el monto económico estatal que se le destina anualmente a la universidad de mayor impacto social, científico y económico de Querétaro.

Hoy presumen de haberle cumplido a la UAQ y señalan falta de compromiso del Gobierno de México que encabeza el compañero Presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando en términos reales los recursos federales representan un 66% contra un 34% que es equivalente a lo entregado por gobierno estatal.

Las cifras hablan por sí solas, la voluntad por un presupuesto peso a peso no existe, aunque al resto de las universidades públicas de Querétaro sí se le da dicho recurso, palabras más, palabras menos, la Máxima Casa de Estudios no está y nunca estuvo en las prioridades de la actual administración.