Cuando uno anda de viaje tiende a comparar todo lo bueno y sobre todo lo malo que existe en su país contra lo que ve en el destino visitado, e idealizamos lo increíble que podría ser si en nuestros destinos de origen tuviéramos esa modernidad y la tecnología, la calidad, el servicio o las facilidades que tienen los habitantes. Sucede mucho cuando vamos a países de primer mundo, en donde los supermercados ya no tienen empleados, todo funciona por medio de tu teléfono, con una aplicación que se conecta con tu celular y el carrito inteligente que te indica todo lo que vas añadiendo, peso, cantidad y precio, además lo más importante, y por si fuera poco, te dice si te alcanza o no para pagar, porque si, resulta que tu tarjeta debe estar registrada para que puedas hacerlo. Quienes gusten ver videos de este tipo de supermercado, búsquenlo como Amazon Fresh. Pasa con muchas cosas, los cobros en las tiendas por medio de QR o el autodespacho de gasolina en Estados Unidos y Europa, que ya tiene muchos años. Pero quisiera hablarles sobre el sistema de transporte público, que sin duda es uno de los detalles que más solemos comparar y más idealizamos tener, e incluso las carreteras y vialidades, y viene a la mente la famosa frase: “si en México existiera este tipo de transporte o estas vialidades, otro gallo cantaría”, pero déjenme decirles que como reza el buen dicho de la abuela, “en todos lados se cuecen habas”. Y sí, Hong Kong y Singapur estarán en la cima del ranking como los países que cuentan con el mejor sistema de transporte público, con la más alta tecnología, calidad y precio, por contar con una alta densidad de estaciones de metro, trenes, teleféricos y además excelente estructura ferroviaria,  pero también pertenecen al continente con uno de los transportes más escandalosos y desordenados que existen. Si México tuviera la cantidad de tuktuks o motocicletas con las que cuenta la mayor parte del sureste asiático, la basura y la contaminación auditiva créanme que no estaríamos tan encantados. La variedad de transporte que existe en dicha zona es realmente asombroso, quizá no lo más moderno, cómodo o lujoso, pero sí lo más económico. Las motocicletas son las más usadas.

En una moto puede ir una familia completa: el papá, la mamá, sus dos hijos y hasta la mascota, lo más sorprendente es que todos manejan “a como Dios les dio a entender”, sin dirección alguna, pueden ir en el sentido que quieran, pasarse el alto en el semáforo, y además llevan todo lo que puedan cargar, mercancía, bultos de frutas o verduras, cajas, electrodomésticos, todo lo que te puedas imaginar, pareciera que no hay ley de tránsito. Y así como las motos “individuales” y las famosas tuktuks, tienen otros que no es lo más moderno pero sí bastante bueno, como el sistema de transporte fluvial que encontramos en Bangkok, Tailandia, que prácticamente funciona como el metro, pero en los canales del Río Chao Phraya, con balsas, lanchas, botes o ferry’s, tanto para locales como para turistas, con rutas que puedes ver en su aplicación, los horarios en que operan y las líneas que manejan.

Y no les digo lo del desorden para que se desilusionen, porque en realidad Asia es una maravilla, la cultura, su población y la gastronomía son toda una delicia. Y sí, al viajar podrán gustarte unos países más que otros, pero Asia es toda una experiencia que seguro superará todas tus expectativas. Tampoco creo que esté mal ver y anhelar todo lo increíble que vemos, pero tampoco estaría mal echarle un ojito a lo que no nos gustaría, ya que en muchas ocasiones pareciera que para allá vamos, ¿no creen?

*Periodista y conductora
Premio Internacional de
 Periodismo Turístico 2022
Otorgado por la OMPT  
Twitter @NatividadSanche
Facebook.com/NatividadSánchezB

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