El Rector de la UAQ, Gilberto Herrera ha mostrado una actitud un poco extraña a mi manera de ver, alienta las protestas de los estudiantes sobre el asunto del presupuesto con cifras que no quedan claras del todo, ha tomado una actitud de víctima por el presupuesto del 2017 y en términos nominales recibirá un mayor ingreso, falta definir lo que pasará con la aportación federal, pero eso aún no se define, solo hay rumores pero nada aún, por lo que habría que esperar como se desenvuelve el asunto allá en San Lázaro, lo grave del asunto es que usar a los estudiantes para presionar el tema, puede salirle contraproducente, si se enciende a los estudiantes, luego se desbocan y no los paran o tendrá tanta seguridad de controlarlos, sobre todo que esa presión no afecta al gobierno federal y las autoridades estatales no se comprometerán hasta saber cómo viene realmente.

Llama la atención el costo que tiene para la UAQ el pago de jubilados. Es un importe que genera una gran presión presupuestal, el problema es que si eso no modifica, en un corto plazo no habrá recursos suficientes para cubrir todas las necesidades universitarias, cada vez más jubilados, sería bueno revisarlo.

Para finales del año siguiente, terminará su periodo el Rector, ya no teniendo opción de reelegirse, así que no es raro que lo mencionen como una opción para un puesto de elección en el 2018, el calendario lo permitirá, pero lo sorprendente es que se comenta que podría ser por Morena, quien aprovecharía la imagen del Rector para ganar votos y volverse la tercera fuerza política del Estado, ya se verá.

El viernes pasado terminó el peregrinar de todos  los presidentes municipales de todo el país ante los Diputados Federales, para entregarles los proyectos para los cuales requieren fondos adicionales, de los famosos 20 millones por Diputado, que habrá que esperar a ver como se los reparten y la realidad es que la decisión de apoyo a un determinado ayuntamiento es más cuestión de voluntad que de procedimientos, así que debían ver una manera menos complicada para registrar los proyectos, que cueste menos y se maltrate menos a los ediles en los trámites que se vuelven bastante molestos y como dicen algunos solo les dan el avión y no les ayuda mucho. Esto empezó cuando unos pocos Presidentes conocieron el camino para acceder a esos recursos, los pudieron aprovechar y bajarlo a sus municipios, logrando mayores recursos y mejores obras, el problema es que después todos quisieron hacer lo mismo y el resultado son largas filas para entrar a San Lázaro con la ilusión de obtener más presupuesto.

Los ayuntamientos ganadores en nuestro Estado serán beneficiados de dos caminos, con lo que quieran apoyar los legisladores queretanos y los apoyos que logren los presidentes con los sus relaciones en las cúpulas de sus partidos.

El proceso interno del PAN es cada vez más complicado y urgente de definir el método de elección, internamente están muy divididos entre Margarita Zavala, Ricardo Anaya y Rafael Moreno Valle, pero a ninguno le alcanza para ganar el solo, por lo que las alianzas entre dos de ellos se están contemplando, ya se ha visto algún intento de hacer un bloque contra el queretano, pero sin que llegue a cuajar al 100%, Dicen que el lunes se llevará a cabo una cena entre el presidente del partido y el aún Gobernador de Puebla, para tratar de llegar a acuerdos, donde se platicará del formato del proceso interno, dicen los que saben, que le plantearán Moreno Valle un plan B que sea atractivo, donde se contemple una salida digna y posiciones para su equipo, pero sobre todo cerrar la posibilidad de que se vaya por la libre y afecte fuertemente al PAN.

Creo que los tiempos difíciles del blanquiazul es noviembre, en diciembre por las vacaciones se relajará un poco y de enero a marzo será muy intenso, teniendo como fecha definitiva a Abril para que todo este negociado y arreglado, sobre todo el método de elección interna. Es un hecho que para el proceso de definición en nuestro Estado, hay que esperar a que este claro el panorama nacional, todo puede cambiar de acuerdo a como se incline la balanza panista, si Ricardo Anaya fuera el elegido, abriría muchos puestos para queretanos en su campaña y quitaría presión al proceso local, mientras que de otra manera, se disputaran entre muchos pocos puestos.

Comentan que atrás de los dimes y diretes entre los líderes del PAN y el PRI con el de Morena está el crecimiento en las encuestas de Andrés Manuel López Obrador y la intención de exponerlo para frenarlo, la pregunta es que si el resultado obedece a esta estrategia o entre más le peguen, más lo hacen crecer.

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