Estudié el diplomado de Cadenas Musculares de Godeliève Denys-Struyf hace ya algunos años y tenemos una retroalimentación mensual de un grupo de estudio, y justo hoy vimos la importancia que casi nadie ve: de cómo nosotros, como terapeutas, no solamente estamos buscando cómo darte las herramientas para que tú y todo lo que implica la causa del dolor, enfermedad o padecimiento, sino también cualquier persona que es profesional en el sector de la rehabilitación o habilitación debe de buscar el vínculo que interactúa entre ambas partes.

Desde que hice el método y’u® de manera científica, por mi experiencia en la parte de los números y que todo lo tenía que comprobar, pero también en la parte intuitiva (porque lo hice para mi hija Rebeca) y me interesaba que ella estuviera bien, que le fuera no solamente agradable sino satisfactorio y SIN dolor, y mi foco era su calidad de vida, mi foco era que ella viviera, durmiera, despertara sin dolor, y la combinación de  ambas me llevó a entender que entre ella y yo se tenía que generar una vínculo para que no sólo en lo que le iba enseñando, sino también en mi posición, en mi postura, en las emociones que estaba viviendo, ella es y era un receptor de lo que a mí  me pasaba.

Y hoy que me lo recordaron, de la importancia de entender que nuestra presencia implica una influencia en el otro y que cuanto más afable se lo haga a través de escuchar que necesita en ese momento preciso, más lograré darle las herramientas para que éste las pueda percibir y escuchar. Gracias a esto y el poderte ver y reconocer en el otro nos lleva a una consciencia profundísima para que los rangos de error se hagan infinitamente más viables para que ese paciente literalmente se cure para siempre.

Hablemos ahora de la vida cotidiana, no hay mejor manera de curarse para siempre que a través de generar nuevos patrones en la mecánica, el 92 por ciento de los casos que recibimos en y’u® por un dolor crónico que no se deriva de un trauma o se determina como causa de éste, provienen de muchos malos hábitos, que a pesar que vayan a terapia y les den higiene postural, su cerebro ya está programado para arrancar un programa que vuelva a hacer el mismo error repetidamente.

Si cambian sus hábitos de manera cotidiana de tal forma que logren una mejor biomecánica, pero lo hacen a través de poner el propósito que no solamente se sienta satisfactorio durante esa acción, pero que se derrame un proceso donde se sienten mejor a nivel emocional,  descansan mejor y se levantan con más energía, se sientan con mucho interés, se levanten y se acuesten con mucho entusiasmo y nunca sientan dolor al realizar todo lo anterior, entonces sí, o sí ustedes tienen mucha más probabilidad de curarse para siempre, y no, como en la mayoría de los centros de rehabilitación, esperen que los cure el terapeuta.

¿Sintieron confusión cuando les digo que no es el terapeuta el que los cura, sino ustedes? La mayoría estoy segura lo sienten, porque en occidente pretendemos ir a un lugar a que nos curen.

*Creadora del método y’u® 
y autora del libro KidPilates®